Soluciones inmediatas para la ciudad de hoy
"Estudios que demoran 5 años en promedio, luego licitaciones para diseñar respuestas a esas situaciones en particular para luego postular a financiamiento a ejecución". "Hablamos de largos tiempos entendibles dentro del desarrollo urbano, pero finalmente desfasados de las necesidades de una sociedad de rápido avance".
Francisco Cooper, - Urbanista
Mucho se ha estudiado y escrito sobre cómo deben ser las ciudades y su funcionamiento. Desde ciudades a escala humana a Smart Cities con medidas sostenibles, tecnológicas e innovadoras de medición, análisis y constante mejora para la calidad de vida urbana. Ya la mayoría de las agrupaciones de la sociedad civil y expertos en temas urbanos son parte del relato de cómo queremos y cómo debe ser una ciudad en base a sus experiencias.
Con la insistencia de la implementación de sistemas de transporte multimodal, el cambio de paradigma de la movilidad favoreciendo al peatón, al ciclista y al transporte público, uno se pregunta ¿por qué en las ciudades aún predominan las metodologías y los diseños de ciudades ya obsoletas? Estudios que demoran 5 años en promedio, luego licitaciones para diseñar respuestas a esas situaciones en particular para luego postular a financiamiento a ejecución.
Hablamos de largos tiempos entendibles dentro del desarrollo urbano, pero finalmente desfasados de las necesidades de una sociedad de rápido avance. Soluciones de ayer pensando en el hoy, pero ejecutadas mañana.
En ese sentido, la pandemia nos enseñó que el momento de diseñar y ejecutar es ahora; que las soluciones deben ser inmediatas y las problemáticas o situaciones que se presentan son suficientes para justificar cualquier inversión para el correcto funcionamiento de una ciudad en constante cambio. Y ahí volvemos al tema de las agrupaciones y de los expertos en temáticas urbanas. Todos somos usuarios de la ciudad a la cual pertenecemos.
El peatón, el ciclista, la persona con movilidad reducida que necesita de continuidad espacial para su desplazamiento, los niños, la tercera edad, etc. Si ya está todo estudiado y dicho, ¿por qué no tomar decisiones importantes al respecto?
Aplicar restricción vehicular en Arica -si bien en promedio cada familia tiene más de un automóvil e igual se generan embotellamientos-, ha significado un avance y una oportunidad para quitarle espacio al vehículo y comenzar desde ya a diseñar y ejecutar ciclovías para fomentar el uso de ciclos.
Comenzar a pensar en el cierre y peatonalización del centro; limitar el ingreso vehicular solamente a residentes y abastecimiento y retiro de basura en horarios predefinidos. Pensar más en las aceras y no en las calzadas; es decir en todo tipo de peatón sin discriminar. Estas medidas se han implementado desde hace más de 20 años en el resto del mundo y sus beneficios ya han sido avalados por expertos. Sólo queda la voluntad para implementarlas.
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