143 años del Combate Naval de Iquique y el ejemplo de Prat que sigue aún vigente
Después de dos años, retornan los desfiles y actos presenciales en el 21 de mayo que forman parte de la tradición del norte.
Las ceremonias conmemorativas de la gesta del capitán Arturo Prat y sus hombres en la rada de Iquique durante este año tienen un significado especial para la Armada, autoridades y comunidad de la Región de Arica y Parinacota.
Esto porque después de dos años, marcados por la pandemia de covid-19, volvieron los tradicionales actos y desfiles presenciales que forman parte de la identidad de los nortinos , quienes vuelven a festejar el 'Día de las Glorias Navales' sin cuarentenas o restricciones de movilidad por el coronavirus, aunque sí manteniendo las mascarillas y distancia prudente entre las personas.
A nivel nacional, el Presidente Gabriel Boric junto al comandante en jefe de la Armada, almirante Juan Andrés de la Maza, serán hoy protagonistas del acto y desfile por el 'Día de las Glorias Navales', que incluye la visita a la cripta de los héroes de Iquique, en la Plaza Sotomayor de Valparaíso. En este desfile participarán cerca de 2 mil uniformados.
La figura del capitán Arturo Prat cada día convoca más a la ciudadanía. Su perfil de abogado, académico, marino y héroe del Combate Naval de Iquique vuelve a situarlo como uno de los principales referentes de la historia nacional, sobre todo por su papel de aglutinador del sentimiento de chilenidad, como ocurrió en el inicio de la Guerra del Pacífico.
Almirante
Luego de estallar el conflicto bélico, y bajo las órdenes del almirante Juan Williams Rebolledo, Arturo Prat tomó el mando de la 'Esmeralda' con la orden de iniciar el plan de ataque al puerto peruano de Callao.
Así, el miércoles 5 de abril de 1879, las autoridades nacionales movilizaron a la Armada Nacional hacia el norte, con el propósito de controlar las maniobras de la Armada de Perú que era ampliamente superior a la fuerza naval chilena.
El 16 de mayo, almirante Williams Rebolledo, ante la inactividad de sus naves, decidió expedicionar al puerto del Callao, donde estaba la escuadra peruana. Zarpó con todos los buques disponibles, a excepción de la corbeta 'Esmeralda', la goleta cañonera 'Covadonga' y el transporte 'Lamar', que bloquearon el puerto de Iquique.
Estrategia
Al enterarse de esta maniobra, el gobierno peruano dispuso el zarpe de inmediato del blindado 'Huáscar' y la fragata blindada 'Independencia', al mando de los capitanes Miguel Grau y Juan Guillermo Moore, respectivamente, para capturar o hundir a los buques chilenos en Iquique.
El miércoles 21 de mayo, el bloqueo se mantenía como de costumbre. Al alba, el horizonte estaba cubierto por una espesa neblina. A las seis horas y treinta minutos el vigía de la 'Covadonga' gritó: "¡Humos al norte!".
Prat ordenó a su tripulación prepararse para el combate. Sin embargo, el 'Huáscar' con mejor artillería inmovilizó a la coberta y lanzó un primer espolonazo, que penetró las entrañas de la embarcación.
El capitán Prat aprovechó este espolonazo para saltar a la cubierta con el grito 'al abordaje muchachos". Sin embargo, cayó herido de muerte en la cubierta del monitor peruano.
La 'Esmeralda' soportó otras dos embestida del ' Huáscar' y luego de cuatro horas de combate se hundió sin rendirse y con todas su banderas al tope cerca de las 12.10 minutos en la rada de Iquique.
De una dotación total de 201 hombres, compuesta por 16 oficiales y 185 gente de mar, murieron 141, de ellos siete oficiales y 134 tripulantes, sobrevivieron 60.
Otros héroes
Además del capitán Arturo Prat, otros héroes marcaron la gesta del Combate Naval de Iquique, ya que cumplieron con su arenga de cumplir con su deber hasta el final y no rendirse, pese a las desfavorables condiciones ante el monitor peruano 'Huáscar'.
Así, cuando Prat saltó al abordaje su orden no fue oída por toda la tripulación de la 'Esmeralda' y solo el sargento Juan de Dios Aldea Fonseca junto al marinero Luis Ugarte lo acompañaron. El capitán Prat recibió un tiro que lo dobló de rodillas y otro disparo en la frente acabó con su vida. El sargento Aldea moría de las heridas, tres días más tarde.
El teniente Luis Uribe Orrego reemplazó a Prat en el combate, y un cuarto de hora más tarde, el 'Huáscar' clavó otra vez su espolón en la 'Esmeralda' hundiéndola parcialmente. Necesitó de un nuevo espolonazo para terminar con ella.
Uribe logró sobrevivir al naufragio de la 'Esmeralda' y fue conducido como prisionero de guerra a la localidad peruana de Tarma. Mientras permanecía prisionero, en Chile era ascendido a capitán de Fragata el 16 de junio de 1879.
Asimismo, el corneta y tambor Gaspar Cabrales murió casi al mismo tiempo que su comandante. El cabo Crispín Reyes, al ver que el corneta Cabrales había sucumbido, tomó el instrumento y siguió tocando "al ataque", hasta que una granada le voló la cabeza. Entonces tomó la corneta, el grumete Pantaleón Cortés, quien continuó tocando hasta que el buque se hundió.
Cañonazo
En otra parte del combate, el teniente Ignacio Serrano Montaner en el momento que los dos buques se encontraban juntos, saltó al abordaje seguido de doce marineros que llevando rifles y machetes cayeron sobre la cubierta del "Huáscar", donde los recibió una lluvia de balas.
Otro gesto heroico estuvo protagonizado por el guardiamarina Ernesto Riquelme Venegas, quien gritando vivas a Chile, se agarró en un esfuerzo extremo a su pieza de artillería y disparó el último cañonazo al 'Huáscar'.
Un combate que unió a Chile en el inicio de la Guerra del Pacífico.