Editorial
Destrucción de señales de tránsito
Las señales de tránsito son fundamentales para el buen funcionamiento del sistema vial. Son los elementos que guían, permiten, prohiben, informan, advierten y que en general, dan a conocer las disposiciones y reglamentos aplicados en las calles, caminos y carreteras. Sin ellas, la conducción y el tránsito en general, podrían ser un caos y fundamentalmente, un enorme peligro.
Es por eso que resulta grave conocer que anualmente, Arica sufre pérdidas millonarias debido a la destrucción de señalética de tránsito. Sólo por concepto de choques a semáforos, son millones de pesos los que se deben invertir para su reparación.
Quienes perpetran estos verdaderos atentados no toman en cuenta las consecuencias que tiene el destruir y dañar señales, consecuencias que pueden afectarlos incluso a ellos. La falta, por ejemplo, un una señal pare, puede motivar accidentes muy graves. Lo mismo con otros signos de tránsito similares.
Algo similar puede ocurrir con las señales que dan a conocer los nombres y sentidos de las calles. En un primer aspecto, la ausencia de información sobre el sentido del tránsito en una vía puede llevar a accidentes. Y en otro, la desinformación puede dificultar enormemente el hallar direcciones y domicilios.
En términos turísticos y patrimoniales también puede haber perjuicios importantes para la ciudad. El rayado, alteración de destrucción de señales hace que Arica se transforme en una ciudad desordenada y poco hospitalaria. ¿De qué sirve tener hitos patrimoniales si los turistas no saben cómo llegar o dónde estos se encuentran?
De más está decir la pésima impresión, la mala imagen que proyecta una ciudad cuyas señales destinadas a ayudar a los visitantes se encuentran dañadas, alteradas o destruidas.
SI bien la Ley establece sanciones para este tipo de conductas, el alterar, dañar, robar o destruir las señales de tránsito y la señalética vial, el problema se mantiene y sigue provocando todos los perjuicios antes expuestos. Por lo pronto, queda a la mano sólo la denuncia y esperar que las autoridades mantengan los esfuerzos para reponer y mejorar las señales de tránsito dañadas.
"Sólo con los choques a semáforos, la comuna pierde año a año millones de pesos".