Emprendedores se la juegan con proyecto avícola en Alto Azapa
Ni siquiera las condiciones adversas han logrado detener su empeño y voluntad.
Redacción - La Estrella
Un total de 71 emprendedores que se dedican a la crianza de gallinas y venta de huevos en la Quebrada de Las Llosyas en el sector alto del valle de Azapa en Arica, generan empleabilidad y un círculo virtuoso, bajo un sistema asociativo de gallineros, desde el año 2015, pese a estar situados en un terreno distante de la urbanidad, desértico, sin agua potable ni electricidad.
Pese a la adversidad de las condiciones con las que trabajan, pero con el ímpetu del emprendimiento, lograron organizarse y asociarse como Asociación Gremial de Micro Emprendedores Innovadores "URURI" y desarrollando este proyecto avícola, obtuvieron un contrato de arrendamiento de 15 hectáreas por parte de Bienes Nacionales, en 2016.
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Para alimentar a las gallinas y efectuar su trabajo, contratan camiones aljibes que les llevan agua, debiendo pagar elevados precios por su transporte y adquisición y gracias a un 6% del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) al que postularon hace un tiempo, hoy cuentan con energía solar que les permite tener mejores condiciones laborales.
Este año, su sueño se vio amenazado debido a que venció su arrendamiento, sin embargo, lograron la colaboración, compromiso y acompañamiento, del senador José Miguel Durana y del diputado, Luis Rocafull, alcanzando una renovación por otros 5 años más, que les permitirá regular nuevamente sus terrenos.En una reunión telemática recibieron la buena noticia desde la capital. Participaron la jefa de División de la Subsecretaría, María Angélica Palacios; el asesor Jaime Coloma; la abogada, Carolina Correa; los dirigentes de URURI Sandra Galleguillos, Franklin Salva, Rudy Cortés y el senador Durana, quien agradeció el apoyo ministerial al mismo tiempo que destacó el emprendimiento que lleva adelante esta Agrupación en el valle. Claro que el anhelo URURI es la venta de los terrenos, según expresan sus dirigentes, sin embargo, se les explicó que Bienes Nacionales realiza licitaciones públicas cada año, por lo tanto, no pueden realizar una compra directa, pero sí podrían optar a una concesión de uso oneroso de 40 años que les generaría estabilidad y una mayor certeza jurídica.