Jorge Reyes Patuelli

Una gran confesión realizó el DT de Universidad Católica, Gustavo Poyet, sobre su presente. "Me está costando un poco más de lo que esperaba", dijo el uruguayo que, si bien fue blindado por Juan Tagle, presidente de Cruzados, está viviendo días complicados.

"Tengo que seguir en la línea de lo que quiero buscar… que me está costando un poquito más de lo que esperaba, es verdad. No tengo temor a decirlo. Pensé que con la calidad de jugadores me iba a costar menos", sostuvo Poyet a la radio uruguaya Sport 890.

El exdelantero de los cruzados, Miguel Ángel Neira, cree que el duelo de mañana ante Nacional por Copa Libertadores es fundamental para seguir con vida, pero critica a Poyet y a la directiva, ya que, según él, solo se reforzaron para ganar el Campeonato Nacional sin pensar en el ámbito internacional.

"Poyet se ha equivocado en poner jugadores en posiciones que no corresponde. Como Diego Buonanotte de puntero derecho o Diego Valencia por la izquierda. Son errores que no ocurrían con técnicos anteriores donde los jugadores jugaban en sus puestos", comentó Neira a hoyxhoy.

"Da la impresión que les preocupa ganar solamente en el Torneo Nacional y no avanzar en la Libertadores. Saben que, aunque no estén jugando bien, en Chile pueden salir campeón igual porque el resto de los equipos está muy mal, en tanto a nivel internacional, donde el año pasado no llegó a ningún lado, este año va por el mismo camino. Yo creo que la dirigencia se equivocó al no reforzar el equipo", agregó.

Sobre las principales falencias del equipo, Neira critica la lentitud que ha mostrado dentro de la cancha. "El hecho de jugar tanto con el arquero lo pueden hacer ahora porque no hay público, porque todo el estadio lo estaría pifiando. Dituro parece ser el '10' del equipo. Eso perjudica a la UC porque sale muy lento y a nivel internacional el ritmo lo ha afectado. Algunos jugadores en el torneo lo cal hacen lo que quieren, pero en la Libertadores no", sostuvo.

"Poyet debe haber visto muchos partidos de la UC antes de asumir y se encontró una realidad distinta, de ahí puede venir la desesperación del entrenador", añadió.

El Manchester City se convirtió en el primer finalista de la Champions League al vencer ayer 2-0 al París Saint-Germain en casa, al que ya derrotó en la ida por 1-2 en París, en el encuentro de vuelta de las semifinales del torneo continental.

Un doblete del argelino Riyad Mahrez, que abrió el marcador para los locales a los 11 minutos y estableció el definitivo 2-0 en el 63', selló el pase de los del español Pep Guardiola para la final, algo que llevaba tantos años buscando. Será la primera del equipo inglés y la tercera de Pep, tras su último título conseguido en 2011 con el Barcelona.

El primer gol brilló con el sello del entrenador español, porque nació de un pelotazo con intención de Ederson. Oleksandr Zinchenko cogió adelantada a toda la defensa, llegó hasta el área y puso un pase atrás que remató Kevin De Bruyne. Rechazó la defensa y el rebote le quedó a Mahrez que coló la pelota entre las piernas de Keylor Navas.

De un tiro de esquina a favor del PSG, llegó el segundo de los ingleses. Balón filtrado por De Bruyne, pase de la muerte de Phil Foden y remate a placer de Mahrez. Contrataque perfecto.

El rival del Manchester City en la final, que se disputará el próximo 29 de mayo en Estambul, saldrá del duelo entre el Real Madrid y el Chelsea.

El volante de la selección colombiana, James Rodríguez, confesó haber sido amenazado al no pronunciarse sobre el difícil momento que vive su país luego de varios días de protestas. El también mediocampista del Everton utilizó sus redes sociales para explicar la situación. "Me han tratado muy mal en redes sociales porque no salgo a decir lo que muchos quieren. Me han amenazado a mí y a mi familia. (...) Los mismos que piden justicia intimidan y huyen", escribió. "Basta de abusos, no puede suceder que alguien con un arma tome ventaja sobre otra persona que no tiene como defenderse", agregó el jugador sobre las manifestaciones que ha dejado varios muertos en el país.