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Es emocionante pensar en un árbol de tamaño completo encerrado dentro de cada semilla que todavía se aferra a las ramas de varios árboles al final del verano.
Con esa idea en mente hay quienes se aventuran a dejar caer semillas en un poco de tierra para maceteros, esperando que se conviertan en un árbol. Sin embargo, esto no siempre se logra. A veces ni siquiera germinan y otras veces lo hacen, comienzan a crecer y luego su crecimiento se estanca.
La razón de la falta de crecimiento de ciertas semillas como las de manzana y otros árboles de climas fríos es, en muchas ocasiones, que requieren un tratamiento antes de germinar.
Engañar la semilla
Si una semilla de manzana u otra de un árbol e clima frío creciera tan pronto tocara el suelo a fines del verano o principios del otoño, la vida de las tiernas plántulas jóvenes sería realmente corta, apagada con la primera helada. Entonces, la mayoría de las semillas de árboles que maduran en otoño pueden permanecer inactivas hasta que se convenzan de que el invierno ha terminado.
Se puede engañar a estas semillas para que crezcan antes manteniéndolas frescas y húmedas durante un par de meses. Empacar las semillas en bolsas de plástico con tierra húmeda para macetas, luego colocar la bolsa en el refrigerador o en el garaje. Este proceso se llama "estratificación", porque los productores de viveros solían hacerlo alternando capas de semillas con capas de tierra en cajas.
Por supuesto, también se puede sembrar semillas directamente al aire libre y dejar que esperen el invierno de forma natural, pero luego se enfrentan a peligros como pájaros, inundaciones y más.
Son temperaturas frescas, no frías, las que despiertan a una semilla del sueño. Las horas de enfriamiento se acumulan solo cuando está entre 0°C y 10°C. Por lo tanto, el enfriamiento puede comenzar en otoño pero no terminar hasta fines del invierno o la primavera, lo que reduce la probabilidad de que brote una semilla durante un período cálido de febrero. O todo el enfriamiento podría tener lugar a fines del invierno o la primavera.
Otras consideraciones
Algunas semillas tienen una capa dura que debe hacerse permeable al agua antes de estratificar la semilla. Una forma de dejar que entre el agua en redbud, enebro, carpe y otras semillas de capa dura es cortarlas con una lima pequeña.
La calidez húmeda logrará lo mismo que cortar con una lima. Se pueden empacar las semillas en bolsas de plástico, como se indicó antes, pero dejarlas en una habitación cálida durante dos o tres meses antes de la estratificación.
Las semillas estratificadas generalmente brotan tan pronto como han acumulado la cantidad de horas de enfriamiento que necesitan. Para el arce de azúcar, eso significa de tres a cuatro meses; para el cornejo, cuatro meses; para la manzana, de dos a tres meses.
Hay que estar atento a las semillas estratificadas, porque una semana estarán dormidas y una semana después, ¡bingo! - están brotando raíces gordas y blancas. Una vez que las semillas broten, hay que colocarlas en macetas o mantenerlas lo suficientemente frescas para detener el crecimiento hasta que sea el momento de plantarlas al aire libre.