Editorial
Después de la venta
Ayer miércoles finalizó otra jornada de ventas electrónicas conocida como Cyber Monday. Se espera que hoy sea el momento de los balances y de los resultados, que por lo general suelen ser favorables para las marcas y empresas que aprovechan estos días para el comercio Online. Un sistema, por cierto que puede ser muy cómodo para las empresas.
De hecho, el último CyberDay de este año registró ventas por 368 millones de dólares y más de 4 millones de transacciones, dejando en evidencia así una cifra histórica que duplicó alcanzada en la versión anterior.
Un hecho que confirma el comportamiento que está teniendo el comercio electrónico en nuestro país, a la par con lo que ocurre en todo el mundo, y en sintonía también con lo que ha estado pasando debido a la pandemia del coronavirus.
Las medidas de confinamiento han hecho que la compraventa presencial se haya reducido drásticamente durante este año, dando paso al comercio virtual. Pero el talón de Aquiles de esta manera de comprar sigue siendo la post venta.
Los reclamos por un mal servicio de post venta ante el Sernac, en el primer semestre de este año se elevaron a los 72 mil. Además, un 31% de los consumidores que tuvieron problemas con su compra online, afirma que la compañía en cuestión demoró más de 24 horas en responder a su queja, mientras que un 25% indica que nunca recibió respuesta alguna a sus requerimientos. Al hablar de entrega de soluciones, el escenario es aún peor: Un 49,8% de las personas asegura que sus contratiempos no tuvieron solución. Esto, según datos aportados por la agencia Jelly.
Los análisis tras el Cyber Monday no podrán quedarse sólo en las ganancias, los buenos resultados, y las ventas generadas por todas las empresas y negocios que participaron. Para los consumidores, el Cyber Monday no terminó ayer, sino que concluirá recién cuando reciban los productos que adquirieron.
Y en este sentido, debe existir una fiscalización adecuada y útil para que finalmente estas jornadas de comercio electrónico, realmente se traduzcan en una buena experiencia para los consumidores, y no sólo para quienes venden.
"Hay un claro desafío para que ganen vendedores y compradores después de las jornadas de ventas electrónicas".