Después de terminar un sobresaliente 2017 con un presupuesto de más de 40 mil millones de pesos apoyado en una vigorosa cartera de inversiones gracias al PEDZE, y luego de enfrentar una abrupta caída en 2018 para terminar con un gasto de $ 26 mil millones (no sin mediar un "ingenioso" rescate a cargo de las transferencias para pasar de un 70% a un 96% en el gasto en menos de un mes), se esperaba que 2019 y 2020 fueran años de recuperación.

A comienzos de 2020, como ha sido la costumbre de los últimos tres años, partimos con un expectante presupuesto de $ 34.758 millones. Sin embargo, a contar de abril comenzó un proceso de retroceso y abandono de la gestión de inversiones regionales. Primero, Arica y Parinacota pasa a ser una de las tres regiones que no recibió recursos adicionales destinados a recuperar la economía y enfrentar la pandemia. Segundo, se echó mano a los recursos regionales para hacerle frente. Y, tercero, se le afectó con un recorte presupuestario que alcanzó los 6 mil millones de pesos a mediados del mes de agosto (D.S. de Hacienda N°1175).

El último reporte de SUBDERE, que da cuenta de la gestión acumulada de inversiones a fines del mes de septiembre de 2020, señala que, a nueve meses, la ejecución regional del FNDR alcanza un famélico 35 %. La peor ejecución presupuestaria de todas las regiones de Chile. Con esas cifras, ya sabemos que es lo que se viene en materia de gasto.

Entonces, cuando ya creíamos haber tocado fondo, y pensábamos que 2021 sería un año de recuperación en los aportes estatales con el nuevo impulso fiscal prometido por el gobierno hacia las regiones, resulta que se anuncia con gran cobertura mediática, que "la ley de presupuestos 2021 contempla 36 mil millones de pesos para la región". Apenas 1.242 millones adicionales al presupuesto aprobado para el 2020. Si las matemáticas no nos engañan, esto es sólo un 3,6 % adicional respecto al presupuesto aprobado para el 2020, y no el 5,5 % anunciado por el gobierno regional.

Y si esto no fuera suficiente, volvimos al último lugar de la tabla con el presupuesto regional más bajo de todo el país.

José Miguel Insulza

Senador por Arica y Parinacota

Cuando falta casi un año para las elecciones presidenciales, todo indica que la cantidad de candidatos al sillón de la Moneda será cuantiosa...

Ojala que la oferta, sea la mezcla perfecta de calidad y cantidad sin embargo considerando los requisitos tan básicos, que hoy se exigen para postular al sillón de La Moneda, lo más probable, es que toda la responsabilidad, quedará en las manos de las chilenas y de los chilenos, cuando ejerzan su respectivos votos, ojala que con toda la experiencia adquirida en las últimas elecciones, más un concienzudo análisis de los potenciales candidatos, para que así, no sigan decidiendo sus votos, solo por la sonrisa "pep" de la (del) candidata(o), por sus copiosas y nunca cumplidas promesas, por obligaciones político partidistas o simplemente por consejos de un cercano, tal vez el aplicar análisis FODA, para estudiar las Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas de cada candidato, sería una muy buena opción para decidir el voto con conocimiento...

"No se enamoró de ella, sino de su sombra. La iba a visitar al alba, cuando su amada era más larga"

"Calidad y Cantidad", micro-cuento

de Alejandro Jodorowsky (1929), escritor y director de cine chileno...

Luis Enrique Soler Milla

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