Una cultura que se debe mantener

Una serie de factores que han estado dando para que hoy Arica esté en condiciones tales, que se puede esperar con base en los próximos días dejé la cuarentena que ha llevado por más de un centenar de días.

De hecho, en su reporte de este lunes, las mismas autoridades regionales entregaron cifras alentadoras respecto a la base de la pandemia. Lamentablemente, eso sí, los decesos registrados durante el último fin de semana marcan un momento doloroso de todo lo que está ocurriendo debido a la presencia y la propagación del coronavirus, y son el recuerdo más triste de que nuestra sociedad no puede bajar la guardia.

Sin embargo, es importante notar que los casos activos confirmados en la región bajaron ya a 221, de acuerdo lo que se informaba ayer. Una cantidad muy distinta a la que se registró en algún momento, cuando casi llegaban al millar, que hacía que se reconociera entre las más preocupantes de todo el país.

La positividad también ha experimentado una mejoría, llegando al 3% ayer y a una semanal del 4%, lo que habla de que en la medida que se toman exámenes, en este caso, son menos los positivos que van apareciendo.

Los exámenes también son de enorme importancia. En las últimas semanas, la Búsqueda Activa de Casos a través de testeos en distintos puntos de la comuna, ha permitido ir encontrando a muchas personas que están contagiadas y que sin embargo, no manifiesta ningún síntoma. Sin embargo, ellos sí pueden contagiar a otras personas que pueden enfermar gravemente, e incluso fallecer.

Sin duda que los avances que ha registrado la región y especialmente Arica en términos de indicadores epidemiológicos, tienen relación con los esfuerzos realizados por las autoridades y organismos para contener esta pandemia, pero también con la conciencia que la comunidad ha ido adquiriendo para protegerse y proteger también a los demás.

Cuando Arica deje la cuarentena, será fundamental que las buenas prácticas y la cultura de la prevención que ha conseguido la población, se mantengan.

"Buena parte de la población ha ido adquiriendo hábitos preventivos en medio de esta pandemia".

Certidumbre

"No puede estar así. Si no va a seguir estudiando, tiene que salir a buscar trabajo".

Hoy, cincuenta y dos años más tarde, y recientemente exonerado de su trabajo, recuerda la severidad inherente a las palabras de sus padres y la sensación de estupor y desamparo cuando, cumplidos los dieciséis, lo conminaron a dejar el apacible refugio de su hogar y salir al mundo.

La forastera sensación de no subordinarse a nadie, de levantarse sin horarios ni deberes por cumplir, finalmente se hace familiar y hasta íntima. Y aun con la plusvalía de otorgar algún grado de independencia, pronto es sólo una nueva versión de la rutina. Así, la autonomía no tarda en transmutarse en limitación, logrando hacer sus días más largos, convirtiendo las horas de ocio en tiempo que ocupar, y consiguiendo que incluso las tareas más triviales y amenas, como la de pasear al perro, se transformen en un apático ejercicio al que se esquiva hasta que el perro mismo lo exige a dentelladas. Engrosar el barniz de los ladrillos con nuevas pinceladas, cuidar el despoblado jardín, o arreglar algún utensilio de uso diario, no son faenas que demanden ni muchas horas ni gran concentración. La siesta, antes un momento de placentera holgazanería, va adquiriendo un matiz de hastío. El sueño, ajeno a su voluntad, lo sume en una agobiadora vorágine de antiguos afanes, gestiones por realizar, horarios por cumplir, prisas y deberes que durante la vigilia ni cumple ni tiene. Esta porfiada realidad agrieta y resquebraja el flamante lustre del barniz, brota cual maleza del jardín recién abonado, es aullada por el perro, y reiterada con onírica majadería durante el sueño.

Pero todas estas maniobras evasivas no consiguen ocultar una angustiosa certidumbre: Ya no puede competir en igualdad de condiciones con desempleados más jóvenes. Despojada del carácter de conjetura, adquiere el de certeza. Su vida ya nunca será la misma. Y en tanto un hondo e involuntario suspiro ensancha sus pulmones.

"Todas estas maniobras evasivas no consiguen ocultar una angustiosa certidumbre.."

Carlos Morales Fredes,, escritor

Ordenados

Un buen ejercicio para la fase 2 es lo que han realizado muchas ferias como la misma Dominical tomando todas las medidas sanitarias correspondientes y exigiendo a los clientes cumplan con todo.

Una a una las ferias

El caso es que una a una se han ido sumando las ferias que abren. Es un beneficio para comerciantes y clientes. Ahora es tiempo de que la comunidad toda pueda actuar de manera responsable para no retroceder.

Ambiente de fin de año

Varios negocios y supermercados ya exhiben en vitrinas todo tipo de adornos navideños y hasta los pan de pascua hicieron su aparición. A este paso, luego aparecerán las ofertas para los cotillones de Año Nuevo.