El alcalde Gerardo Espíndola, el presidente del Consejo Regional, Claudio Acuña y los diputados por Arica y Parinacota, participaron en la última sesión de Zonas Extremas de la Cámara de Diputados, exponiendo sus puntos de vista ante el término del Plan Especial de Desarrollo de Zonas Extremas (PEDZE).

Espíndola estuvo a cargo de dar las palabras iniciales, recalcando la ausencia de noticias sobre un compromiso adoptado por el presidente Sebastián Piñera durante una visita a Arica en el año 2019, en la cual mencionó dar continuidad al PEDZE por ser una herramienta fundamental para el desarrollo de zonas estratégicas del país.

Para Espíndola el término de la herramienta es una de las peores situaciones que ha tenido que enfrentar la región desde su creación, solo comparable al término de la Junta de Adelanto.

"El Presidente, además de cortarnos el presupuesto, lo que hace es matar una política que buscar nivelar la cancha entre quienes vivimos en territorios extremos como Punta Arenas o Magallanes, Aysén, Palena y Arica y Parinacota".

Añadió que el PEDZE permite tener una metodología distinta de inversión en estos territorios y que para el Estado de Chile son estratégicos. "Me pregunto si es rentable invertir en nuestro territorio y estoy seguro de que la respuesta del director de Presupuesto sería no, porque desde la lógica del Sistema Nacional de Inversiones, no va a haber rentabilidad social para hacer puentes, escuelas, Cesfam o alumbrado público. Por eso es que es súper importante un plan a largo plazo".

Tras su término en julio, el PEDZE ha sido una exigencia de las autoridades regionales. La importancia del instrumento para el desarrollo de la zona ha hecho que el reclamo por dar pronta continuidad a la medida sea generalizado. En la reunión se esperaba analizar una eventual extensión del plan para Arica y Parinacota.

María José Collado Rojas

mariajose.collado@estrellaarica.cl

La ausencia del subsecretario de Desarrollo Regional, Juan Masferrer, impidió que en la Comisión de Zonas Extremas se profundizara en la continuidad del PEDZE. Además, en la cita se esperaba analizar la medida que los legisladores solicitan perdure, mínimo por diez años.

Luis Rocafull señaló que "no se puede perder el PEDZE, que es una herramienta que disminuye la brecha en el desarrollo de Arica con respecto al centro del país" y por ello, lo ideal sería que un plan de esta naturaleza se extienda por diez años.

"Además somos una zona fronteriza, por lo que deberían existir políticas especiales mínimas, por eso la reunión que tuvimos era muy importante y no corresponde que las autoridades nacionales no asistan".

Por otro lado, el diputado Vlado Mirosevic recalcó en la sesión que el PEDZE ha resultado ser una política exitosa porque significa recursos frescos para la región.

Destacó que una inversión de 1.000 millones de dólares, como la presentada en un principio por la ex presidenta Michelle Bachelet, no puede ser calendarizada a seis años como fue previsto. "Muchas iniciativas quedaron a la deriva ante el cumplimiento del tiempo establecido por decreto, lo que obliga a pensar en una estrategia a largo plazo, que plantee un PEDZE a 10, 15 o 20 años".

Finalmente, el diputado Nino Baltolu añadió que actualmente la región tiene muchas necesidades, "por lo que es urgente que coordinemos el trabajo respecto de lo que se requiere para poder crecer y dar mayores oportunidades a los ariqueños", señaló.

El presidente del CORE, Claudio Acuña, mencionó que el Plan Especial de Desarrollo de Zonas Extremas ha sido la principal herramienta para promover el desarrollo de la región desde su creación, en el año 2007.

"Históricamente, por razones geopolíticas, por su aislamiento y como puerta de entrada al país, la región ha demandado un tratamiento especial. Emerge como ejemplo el desarrollo impulsado por la Junta de Adelanto o el Puerto Libre, la promulgación de leyes especiales, como la conocida Ley Arica en sus versiones I y II o la misma creación de la región, más recientemente", comentó.

Para Acuña, el PEDZE recoge este anhelo y la necesidad de contar con un instrumento permanente de desarrollo. "Además de la metodología del mínimo costo para evaluar las iniciativas de inversión, su principal virtud ha sido que, tanto en la definición de las carteras, como los criterios de priorización de las iniciativas, fueron levantadas y validadas en la región".

Acuña agregó que durante los primeros años de implementación, la región experimentó la mayor transformación en infraestructura pública vista en décadas y el consiguiente apalancamiento de inversión privada. Al segundo año de vigencia, la región registró el crecimiento de la actividad económica más alto del país.

"Mantener el PEDZE es una obligación moral y una responsabilidad del país, una justa aspiración de las regiones y territorios que requieren un impulso especial", sentenció.