Editorial
Alfabetización digital
La crisis sanitaria y el confinamiento han cambiado la vida cotidiana, las rutinas y está la manera de realizar los trámites más comunes que tenía a toda la población. En solo semanas, lo que antes se realizaba con confianza, haciendo filas aunque fuera a regañadientes y en medio de grupos a veces apretados dentro de una oficina bancaria o un centro de pagos, ahora se realiza de manera muy distinta.
Ha sido así como de pronto, muchas personas, especialmente aquellas que no estaban precisamente muy relacionadas con la tecnología, tuvieron que acostumbrarse a pagar cuentas, obtener consultas médicas, sacar permisos temporales y hasta pedir comida y hacer compras a través de la red.
Algunos segmentos de la población, especialmente los más jóvenes, ya se habían acostumbrado al uso de la tecnología para poder realizar muchos de estos trámites. Por ejemplo, algunos servicios de delivery y de reparto a domicilio de compras, ya se estaban viendo en Arica. Sin embargo, la pandemia marcó un punto de inflexión. Terminó obligando a quienes incluso tenían más distancia con estos medios, a incursionar en una nueva forma de relacionarse con la realidad que de golpe impuso la crisis.
Es en este contexto en el que principalmente las personas mayores y quienes históricamente no han tenido mayor acceso a la tecnología, han tenido las mayores dificultades para adaptarse al verdadero desafío que significa cambiar el ambiente con el que nos relacionamos con la sociedad, en cuestiones que incluso pueden ser muy cotidianas.
Es ahora cuando se puede evaluar el trabajo realizado en nuestro país en torno a la alfabetización digital. Cuántos proyectos sobre cursos y capacitaciones se han ganado y realizado, y cuántos de ellos efectivamente hoy se pueden considerar oportunos, pertinentes y necesarios para un gran segmento de la población. La alfabetización debe partir hoy por lo cotidiano, por enseñar especialmente a quienes más lo necesitan, como relacionarse con el nuevo ambiente en el que nos movemos y vivimos, el ambiente que impone la red y los servicios que cada día crecen y se expanden en ella.
"La pandemia ha puesto de relieve la relación que existe entre los ciudadanos y principalmente internet".