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Urgente responsabilidad

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Dado que, tal como se esperaba, los contagios de coronavirus (COVID-19) alcanzaron ya un ritmo exponencial en nuestro país, ayer durante la tarde nuevamente el gobierno anunciaba medidas, cada vez más rigurosas, destinadas a frenar la propagación de este virus en el país.

Hoy, es muy importante que la comunidad esté atenta a la información oficial que hay respecto a la manera como se está abordando esta emergencia sanitaria en Chile. La aparición de casos, como también los nuevos escenarios que día a día se establecen debido a los contagios, van exigiendo medidas cada vez más específicas que deben ser acatadas de manera muy responsable.

Esta misma responsabilidad se exige hoy también para la manera en que informamos y nos informamos respecto del avance del coronavirus. Esto, porque los rumores generan desinformación y una sensación de alarma que es artificial y muy poco conveniente. Por el contrario, más que alarma, debemos estar atentos acaba alerta que haya respecto a los pasos que como sociedad debemos seguir, y también de las acciones individuales y familiares.

Este fin de semana, la Seremi de Salud en la región tuvo que salir al paso de rumores que se extendían en las redes sociales, y que aseguraban que en Arica había casos ya declarados de COVID-19. Los mensajes incluían fotografías de profesionales de la salud vestidos de acuerdo al protocolo para enfrentar eventuales casos.

Al respecto la Seremi de Salud aclaró que las imágenes difundidas en las que se ve a personal de salud vestido con elementos de protección personal no corresponden exclusivamente a funcionarios que detecten casos sospechosos de COVID-19, "sino que se aplica cuando llegan pacientes con cualquier otra patología epidemiológica que pueda significar un riesgo para el trabajador de salud".

El sentido común indica que lo que menos está haciendo hoy la autoridad sanitaria en el país, es ocultar los casos. El comportamiento del coronavirus demanda una enorme transparencia y actuar con prontitud. Es por eso que lo mejor es informarse siempre a través de los canales oficiales y evitar propagar noticias inciertas y de dudoso origen.

Sin fútbol joven

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La Anfp informó que todos los campeonatos del fútbol joven quedan suspendidos durante su segunda fecha, incluyendo además la realización de la captación de jugadores sub-15 y sub-17 en Iquique.


A enfrentarlo con calma y no desabastecer

Ante las medidas entregadas para evitar el contagio del coronavirus, la higiene y el lavado de manos es fundamental, pero a comprar los artículos de primera necesidad con calma y no desabastecer, ya que aún hay para todos.


Rumores y más rumores

Que se cierran las fronteras, que podría haber desabastecimiento... muchos son los rumores por la propagación del coronavirus.

Hasta que no haya nada confirmado, lo mejor es mantener la calma y no creer todo lo que se ve en las redes sociales.

Todo depende del contexto

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Hace cinco meses, a días del estallido social, todo parecía estar en calma en Chile, como que - utilizando un giro poético en su discurso- el presidente expresaba que el país era un oasis, inserto en el complejo entramado político y económico del continente americano. Esa era la percepción que tenía el gobernante, que era compartida por sus seguidores y rechazada por una gran mayoría de los chilenos, para quienes la visión del mandatario no era más que un espejismo, producto de la ilusión de querer ver algo inexistente.

Dentro de ese contexto, durante las semanas que siguieron al estallido social, más de un millón de manifestantes salieron a las calles para denunciar con vigor la falta de coherencia entre las demandas planteadas (salario mínimo ético, pensiones dignas, atención oportuna en salud y educación de calidad ) y las propuestas de solución, emanadas del poder central.

Fue entonces, cuando parecía que al gobierno le restaban pocas fichas para apostar y cuando la presión de las manifestaciones se perfilaba como una fuerza que podía inclinar la balanza en pos de un cambio social; que de pronto -sin anunciarse - se hizo presente el miembro de la ecuación, que hasta entonces había estado ausente en el proceso; me refiero a la "clase política" chilena, que en un desesperado intento por recuperar algo de su desgastada imagen, invocando el alicaído principio de unidad nacional, convocó a los chilenos para trabajar en la elaboración de un "nuevo pacto social", para hacerse cargo de las demandas planteadas por el pueblo.

La propuesta de los políticos, que amerita contar con una nueva constitución, va a demorar al menos dos años el inicio de las reformas, lo que garantiza al gobierno todo el tiempo que necesite para estudiar, debatir y definir como se van a satisfacer las demandas sociales, acumuladas en 30 años desde el retorno de la democracia.

De esta forma, recien hacia comienzos de 2022, se podrán reiniciar las conversaciones sobre reformas sociales y económicas. Todo esto -claro está - dependiendo del resultado del plebiscito de aprobación o rechazo a la propuesta emanada de la clase política, señal que en última instancia va a determinar inequívocamente el contexto en que van a desarrollar los tan esperados cambios.

"La propuesta de los políticos , que amerita contar con una nueva constitución, va a demorar al menos dos años...".