Presidente inició su visita en la Quebrada de Escritos
Se reunió con las víctimas de minas antipersonales tanto civiles como militares.
El 2005, en un día de actividades normales, el sargento segundo Adams Lagos Becerra, perteneciente al desminado Brigada Motorizada Rancagua, sintió una fuerte explosión, una mina antipersonal le había detonado en su pie.
"Como buen soldado puse mi mente en frío y traté de calmarme con la finalidad de no lesionar a mis compañeros. A uno se le pasa la vida en un segundo, logré dimensionar lo que había ocurrido, tenía mi pie destrozado", contó Lagos.
De este hecho ya pasaron 13 años y tuvo que enfrentar 7 operaciones, perdió 3 dedos y con solo 24 años tuvo que volver a caminar nuevamente.
El sargento Lagos contó su caso al Presidente de la República, Sebastián Piñera, quien participó junto con el ministro de Defensa, Alberto Espina, en el inicio al sistema de reparación y asistencia en rehabilitación a víctimas de minas antipersonales, actividad realizada ayer en la Quebrad de Escritos.
Según lo informado por Piñera se registraron un total de 198 casos, 46 de ellos murieron a causa de la explosión y 152 sufrieron graves heridas.
La ley
La ley entró oficialmente en vigencia en noviembre de 2018, cuando comenzó el proceso de acreditación de calidad de víctimas.
El ministro de defensa Alberto Espina, manifestó que es de enorme importancia que el estado de Chile reconozca que han existido víctimas absolutamente inocentes tanto civiles como militares que producto de la instalación de más de 180 mil minas antipersonales han resultado heridas y en otros casos muertas.
"Ya llevamos el 91% de las minas retiradas. Son cerca de 161 mil las que hemos sacado y tenemos el desafío de cubrir la diferencia durante este año y además de hacer entrega de las indemnizaciones a cada una de las víctimas", anunció el ministro.
El retiro de las minas corresponde a uno de los compromisos de la Convención de Ottawa, aprobada en 1997 y suscrita por Chile en 2002, que establece la prohibición, destrucción y limpieza de las zonas minadas, además de la entrega de asistencia a las víctimas.