En algún momento de su vida, Priscila Cruz (37), oriunda de la localidad de Murmuntani en Putre, se prometió no volver más a esas tierras. Se había criado allí y estudió en aquel lejano lugar, por eso la opción de no volver le dio vueltas en la cabeza por mucho tiempo.
Sin embargo, la mujer asegura hoy que el campo le salvó la vida. "Finalmente me di cuenta de que me llena de energía el solo hecho de sembrar. Como mujer joven no solo me interesa vender mis productos en el Agro, sino también exportarlos, porque en la precordillera cultivamos productos sanos y eso es justamente lo que falta hoy en día".
Como ella, decenas de mujeres participaron de la celebración por el Día Internacional de la Mujer Rural, donde fueron reconocidas por el aporte que realizan a la región. En lo que respecta a la fuerza laboral agrícola, las féminas alcanzan cerca del 50% de total de agricultores en Arica y Parinacota.
"Gracias a los valles que existen en nuestra región, las mujeres representan una realidad muy potente. Hemos tenido logros no solo en la recuperación de derechos, sino también, a través de políticas públicas potentes que recogen las necesidades de las mujeres agricultoras para así relevarlas al sitial que se merecen", expresó la intendenta Gladys Acuña.
Dentro de las necesidades de la mujer rural destacan la falta de escuelas y de centros de salud familiar y la capacitación en prevención de enfermedades derivadas del uso de pesticidas, entre otros requerimientos.
"Pese a que los productores del campo en la región son mayoritariamente mujeres, aún existen brechas, por lo que son necesarias instancias de participación para que con toda la institucionalidad pública podamos trabajar en el acortamiento de brechas y en la igualdad de género", destacó el director regional del Instituto Nacional de Desarrollo Agropecuario (Indap), Jorge Torres.
Papa chilota
Mónica Ríos luce con orgullo su vestimenta de afrodescendiente. Un vaporoso vestido combina con el turbante amarillo que lleva en su cabeza. De sus antepasados heredó la siembra, actividad a la que se dedica especializándose en la producción de papas chilotas en Pampa Concordia, productos que asegura, se han dado con éxito en este extremo del país.
"Las mujeres campesinas somos de esfuerzo y de lucha. La mujer agricultora trabaja en los frutos para la comunidad y para sus hijos, para entregar un mejor cultivo, con menos insecticidas. La mujer se preocupa hasta de no maltratar la tierra, sino de abonarla con amor porque es de ahí donde salen los nuevos frutos", sentenció.