Recibimos el año nuevo con fuegos artificiales, luces, cotillón, cenas, alegría y esperanzas, y escuchamos a muchos decir: ¡Cómo voló el año! A más edad, el tiempo pasa aún más rápido, a pesar que quisiéramos detenerlo. No hay duda, que el reloj y el calendario, han traído consigo una utilidad invaluable a la humanidad, y son factores fundamentales para la comunicación y el progreso. Pero también son culpables de hacernos la vida más corta, mostrando a cada segundo y cada día, el inexorable paso del tiempo, como si ambos fueran los tiranos encargados de recordarlo. El hombre de las cavernas experimentaba una larga vida: medía el tiempo por las estaciones, la noche y el día sin sumarlos y sus necesidades básicas, les dejaba tiempo para gozar del tiempo y por ende la vida. El hombre actual adora el reloj y el calendario, dioses que le otorgan un tiempo limitado que acorta su vida. Alarguemos la vida, vivamos sin el acoso del tiempo, e indiferentes dejemos que pase sin notarlo: Feliz a…
Futuro de la PSU
Sin lugar a ninguna duda el chiste de Don Otto, cuando vende el sillón para que su esposa no lo siga engañando, en vez de buscar las causas que lo provocan, debe ser el más utilizado para reflejar algunas opiniones y decisiones de autoridades, parlamentarios y expertos en variados e importantes temas del acontecer diario…
Lo más reciente es cuando a raíz de los bajos resultados obtenidos por los alumnos en la PSU que siguen profundizando la brecha entre la educación pública y privada, no encontraron nada mejor que proponer eliminar la PSU, asumiendo que dicha decisión, como por arte de magia solucionaría todos los problemas y desigualdades de nuestra educación en general…, esto claramente aparte de ser muy sin gracia como el chiste citado, confirma que existen en Chile personas que no entienden nada o no quieren entender el gravísimo estado en que se encuentra nuestra educación a todo nivel y como es su costumbre terminan dando inoportunas, extemporáneas y desinformadas soluciones sin cuantificar sus reales alcances e implicancias.
Marcos Concha Valencia
Luis Enrique Soler Milla