Las historias detrás de quienes optan por empaquetar regalos navideños
Quienes ofrecen el servicio como quienes lo buscan, esperan que la magia llegue en cada obsequio.
En cada envoltorio cuidadosamente preparado, hay historias de quienes encuentran en el empaquetar regalos navideños, una oportunidad, una pasión o un momento especial. Pero en cada regalo también hay clientes que buscan algo más que un papel bonito: buscan regalar magia.
Decenas de hombres y mujeres aprovechan estas fechas para envolver regalos en el Paseo 21 de Mayo o afuera de tiendas y centros comerciales. Más allá del incentivo económico, varios lo hacen con pasión, utilizando atuendos que llaman la atención de sus potenciales clientes. Un delantal rojo, un cintillo de reno o poleras estampadas con el Viejo Pascuero son parte de la propuesta de estos "ayudantes de Santa", que permiten que un obsequio llegue con magia a sus destinatarios.
Claudia Rojas es estudiante universitaria, cursa segundo año de Enfermería, por lo que aprovecha cada fin de año, desde el 2021 para instalarse en la Feria del Juguete. "Para mí, empaquetar regalos es una manera de financiar mis estudios y aprender a sobrellevar ciertas situaciones. Por ejemplo, cada paquete que hago es como un reto, tengo que hacerlo rápido, pero bonito", dijo.
Y es que no es tarea fácil, sobre todo para quienes no cuentan con habilidades manuales, con el tiempo suficiente o con la dedicación para hacer un lindo empaque. "Después de jubilarme, necesitaba sentirme útil y mantenerme activa, y empaquetar regalos me da esa energía. Adoro la Navidad, así que para mí es como estar rodeada de espíritu festivo, y para qué andamos con cosas, la plata igual se necesita", contó Luzmira Ayca.
Camila Luza trabaja junto a su pololo Martín envolviendo regalos. Ambos ingresarán este año a estudiar a la universidad. "Siempre me gustaron las manualidades, así que empaquetar regalos es casi como una forma de arte para mí. Cada cliente tiene una historia, y siento que nuestro trabajo ayuda a hacerla más especial. También sirve para ahorrar un poco y salir de vacaciones en febrero".
Parte de la tradición
Rodrigo es padre de dos hijos. Comentó que prefiere que otra persona envuelva los regalos de sus niños. "Ellos creen que vienen directamente del Viejito Pascuero, así que es importante que se vean perfectos. Además, es un alivio saber que no tengo que preocuparme por eso después", contó.
Una opinión similar tuvo Marcela. "Siempre paso a envolver los regalos de mis nietos aquí porque me encanta cómo trabajan y así también mantenemos la sorpresa. Para mí es parte de la tradición navideña", sentenció.