Avanza tarea para preservar el Qhapac Ñan
Diego Araya destacó la importancia de trabajar en la conservación del Camino del Inca y su legado ancestral.
Alberto Uribe Miranda - La Estrella de Arica
Hace 10 años, seis países sudamericanos lograron el reconocimiento del Qhapaq Ñan - Sistema Vial Andino como Sitio Patrimonio Mundial de la Unesco. Este camino prehispánico, que en su apogeo abarcó más de 30.000 kilómetros, sigue en uso por diversas comunidades indígenas y es una muestra de la sofisticación de la ingeniería y la cosmovisión andina.
Qhapac ñan
En la actualidad, Diego Andrés Araya Acuña se desempeña como el director nacional de la mesa investigativa Qhapac Ñan, una organización dedicada a la preservación y estudio de rutas y sitios arqueológicos en diversas regiones de Chile. Diego y su equipo están enfocados en fortalecer las conexiones entre Zapahuira y Socoroma, y evaluando la posibilidad de extender esta red hasta Putre, uno de los objetivos principales para el 2024.
Además, se han comprometido a la protección de geoglifos en las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta. Según Diego, "la protección de estos geoglifos es esencial para mantener una imagen geocultural andina en la región, lo cual impulsa un nuevo tipo de turismo: el turismo con economía circular". Este enfoque no solo promueve actividades de trekking y aventuras, sino que también busca generar una economía sostenible dentro de las comunidades indígenas locales.
La mesa investigativa Qhapac Ñan cuenta con el apoyo de la Universidad de Tarapacá, incluyendo las carreras de Historia y Geografía, y las facultades de Antropología y Arqueología. Diego enfatiza que "la base sigue siendo quienes éramos alumnos y ahora somos profesionales. Nos reunimos periódicamente y contamos con apoyos gubernamentales y privados para continuar nuestras investigaciones y adquirir tecnologías avanzadas". Sin embargo, Diego reconoce que el camino ha sido arduo. "Está difícil porque hay que hacer nombramientos legales y cambiar ciertos incisos. Los cerros, por ejemplo, no tienen la antigüedad legal reconocida por el estado chileno. A pesar de los años de trabajo, solo hemos avanzado un 70%, y ese progreso es muy lento".
Uno de los mayores desafíos que enfrenta la mesa investigativa es la falta de consideración por parte de ciertas entidades en sus proyectos de infraestructura.
"Las intervenciones en algunos sitios arqueológicos, como los tambos de Zapahuira, han resultado en la pérdida de valor histórico y turístico. A menudo, se contrata a personas que desconocen el contexto histórico y geocultural de la zona", lamentó Diego. De esa manera se trabaja para la preservación del Qhapaq Ñan, buscando su perdurabilidad.
"La base sigue siendo los que antiguamente éramos alumnos y actualmente somos profesionales"
Diego Araya Acuña Mesa Directiva Qhapac Ñan