Seguridad, gran desafío para el 2023

Ayer las autoridades regionales, encabezadas por el delegado presidencial, dieron inicio al plan verano seguro. Tal como lo indica el nombre de esta iniciativa, el objetivo es dar mayor seguridad a la población en puntos claves de la temporada estival.

Es un esfuerzo más que se realiza no solamente en nuestra región sino que también en el país de velar por la seguridad de la población. En el caso de nuestra región y particularmente de Arica, se trata de una cuestión fundamental. Y es que es sin duda uno de los mayores desafíos que tendrán las autoridades y en general la sociedad local para el venidero año 2023, será mejorar la seguridad en términos cuantitativos, cualitativos y también en términos de percepción.

Luego de los efectos del estallido social y posteriormente, de las restricciones derivadas de la pandemia, Arica cambió diametralmente respecto de la ciudad que era hace tres años. En principio, los más de 40 asesinatos que se lamentan en este año, se convierten en una referencia preocupante y reveladora de la situación actual de la comuna en términos de seguridad. Sin embargo, no se trata sólo de este tipo de crímenes.

Nuestra ciudad es una Arica golpeada por la inseguridad. El centro, que otrora fuera un punto de encuentro en términos turísticos y comerciales por excelencia y por historia, en estos días tiene un acotado funcionamiento. Aquellos cafés, restaurantes y otros negocios que se llenaban de vida y actividad durante las noches, hoy cierran y duermen apenas cae el sol. A las 21 horas, la actividad decae profundamente.

Locatarios y comerciantes del sector han hecho saber estas inquietudes en repetidas oportunidades, una realidad que incluso ha sido noticia nacional. Por supuesto, una noticia que un flaco favor le hace a una ciudad que debería tener al turismo como un gran aliado y como un eje decisivo para su desarrollo.

Es por eso que la seguridad debe ser el "gran tema" de Arica para este 2023, debe ser un desafío ineludible y que convoque a la sociedad completa. Los liderazgos, en este contexto, serán indispensables.

"Arica, lamentablemente, ya no es lo que era hace tres o cuatro años. Y eso es un revés que se debe solucionar".

Colocolino

Mi padre "era" del "Colo". "Hincha" acérrimo, incondicional. Cuando vivíamos en Estación Central, villorrio perteneciente al ferrocarril "Arica a La Paz" -donde él trabajaba como obrero "cambiador"- era popularmente conocido por su apasionada adhesión al equipo de fútbol de sus amores. Cuando el "Colo Colo" ganaba, en casa era día de fiesta. En directa contraposición, cuando perdía, la noche se nos encimaba en horario y angustia a mi hermano y yo. Como mi padre salía del trabajo a las 18:00, mamá procuraba darnos de cenar y nos acostaba antes de esa hora, previendo que cualquier asomo de inconsciente regocijo fuese a devenir en inusitado castigo. Hasta ella se mostraba más silenciosa y contrita que de costumbre. Y es que, a la vista de su fanatismo, gran parte de sus colegas en "Central" hacían escarnio de las eventuales derrotas "Colocolinas", por lo que, en aquellas infortunadas ocasiones, llegaba a casa predispuesto a la ira, al furor súbito y desmedido.

Durante toda mi niñez, él fomentó en mí la inclinación por el "Colo". Me compraba gorras y ropas con la insignia del "indio", y me hacía repetir los cánticos alusivos a ese equipo. En casa la radio funcionaba a todo volumen cuando el locutor voceaba los goles del "Colo" y se apagaba antes de finalizar el encuentro, si los albos sumaban un abultado margen de tantos en contra. (Aunque en Europa la televisión ya había sido inventada, para los habitantes del pueblito rural de Central, no existía ni siquiera como concepto).

Será por ello que hoy me considero partidario del "cacique", por una cuestión de fijación paterna. Mas, como el fútbol no es una de mis pasiones, me da casi lo mismo sus triunfos o fracasos. Salvo en encuentros internacionales, partidos en que aflora el instintivo "colocolino" arraigado en mí. El "hincha" que, de algún modo, papá logró fijar en mí infantil subconsciente.

"Durante toda mi niñez, él fomentó en mí la inclinación por el 'Colo'. Me compraba gorras y ropas con la insignia del 'indio'"

Carlos Morales Fredes, Escritor

Deporte: polo turístico

Como bien lo dice un programa de Corfo, Arica está siempre activa con el deporte, por lo que tras algunos torneos nacionales e internacionales, se espera un nuevo flujo de turismo deportivo en el verano.

Movimientos de fin de año

Y se nos está yendo ya la última semana del 2022, con el ajetreo que se echaba de menos en relación a periodos pre pandémicos. Si para la Navidad hubo movimiento, ahora para las compras de Año Nuevo no será menos.

Especial llamado

Las campañas de ayuda a Viña del Mar ya se encuentran activas en Arica, pero el llamado de sus organizadores es claro: No se necesita ropa, ya que en los centros de acopio hay bastante. Apoye con otra cosita, se agradecerá.