Tras 45 años de labor y cruza de cuatro razas, chilenos crean una súper oveja
Investigadores del INIA presentaron la semana pasada a "Hidango", un ovino en el que trabajaron desde 1977 y que se caracteriza por tener más partos, lana fina, carne más magra y mayor adaptabilidad a las condiciones del cambio climático.
Redacción
Luego de cuatro décadas de trabajo, los investigadores del programa de Mejoramiento Genético del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) presentaron la oveja "Hidango", considerada como la raza más prolífica del país debido a su alta capacidad de reproducción, condiciones de pelaje, de carne y adaptación al cambio climático.
Este trabajo se inició en 1977 bajo el liderazgo del investigador Christian Crempien Laborie. Partió con la cruza secuencial de cuatro razas puras, con un 25% de cada una. El procedimiento rescató la alta prolificidad de la raza "Finnish Landrace"; la precocidad, desarrollo muscular y morfoestructura alargada de la "Dorset"; la habilidad maternal, alta producción de leche y rusticidad de la "Border Leicester", cuya pezuña negra permite que no se desarrollen enfermedades podales; y la finura de la lana y adaptabilidad al secano costero de la raza "Merino Precoz", según explicó el INIA en un comunicado.
A través de inseminación artificial, entre estascuatro razas durante 30 años se seleccionaron crías y se ejecutaron mediciones genéticas anuales.
Los investigadores indicaron que de un universo de 100 ovejas se logran obtener 170 corderos, puesto que una hembra "Hidango" puede tener tres partos en dos años. Esto, agregaron desde el instituto, es más que el promedio y permite que la producción sea más rentable y con menor impacto ambiental, ya que al necesitar menos ovejas para procrear se reduce el consumo de pasto y agua, un beneficio si se considera la problemática de escasez hídrica actual, a causa del cambio climático.
Este esfuerzo fue parte el proyecto de "Mejoramiento de la Resiliencia al Cambio Climático de la Pequeña Agricultura", ejecutado por cinco años por el Ministerio de Agricultura con recursos del Fondo de Adaptación al Cambio Climático, para ayudar a más de dos mil familias agricultoras de ocho comunas del secano costero e interior de la Región de O'Higgins a enfrentar los efectos del cambio climático.
"Este cordero gana peso más rápido, por lo que se puede terminar en 85 días e ir al mercado para su venta, por lo tanto, su carne es mucho más magra. También tiene mayor valor, porque su cuero es blanco, apto para curtiembres, y si bien, su lana no es tan fina como la de la Merino, de igual forma se pueden crear piezas de calidad", explicó el médico veterinario e investigador de INIA Rayentué, Marcelo Quezada.
La presentación de esta nueva raza se realizó en el Campo Experimental de INIA Hidango, ubicado en la comuna de Litueche, al que llegaron autoridades nacionale y locales.
"Este anunció representa un hito para nuestra institución, ya que rescata 45 años de investigación científica y ganadera en el país. Hoy somos testigos de las ventajas de contar con instituciones como la nuestra, capaces de desarrollar este tipo de innovaciones y entregar un producto ovino de calidad, apto para la geografía del secano que sea verdaderamente un sinónimo de calidad para las y las y los productores", dijo la directora nacional de INIA, Iris Lobos.
"Invertir en innovación es invertir en el futuro agroalimentario de Chile y el mundo. Nos llena de orgullo ser los precursores de esta nueva raza (...), que permitirá sustentar la producción intensiva de carne ovina en nuestro país", agregó el subsecretario de Agricultura, José Guajardo.
La genética de "Hidango" se trasladará desde la Región de O'Higgins hasta la de Los Lagos, y a países sudamericanos como Uruguay y Argentina, que ya han manifestado su interés por recibirla.