Talento de mujer brilla en la Feria de Artesanía
Anita, la tejedora de "dedos mágicos" y Kenia, emprendedora de tallados y pirografía en madera, se lucen con sus creaciones en el Parque Vicuña Mackenna.
Fue en la Fiesta de la Chilenidad, en Hualpén, que Claudio Parra, de Los Jaivas, la vio tejer. No usaba palillos, crochet ni telar, si no solo sus dedos. "Anita, la dedos mágicos" llamó a la hábil mujer, que ahora recorre el país mostrando su arte.
Ana Pinto es oriunda de Concepción y llegó a la ciudad a participar de una nueva versión de la Feria Internacional de Artesanía (FIDA) que se desarrolla en el Parque Vicuña Mackenna hasta este lunes. En el lugar, comercializa sus tejidos hechos literalmente, a mano. Hay cuellos, zapatitos de bebé, mantas y creaciones realizadas también en vellón como aros y hadas colgantes.
"Soy una tejedora con dedos. Me gustó lo que me dijo Claudio Parra, así que es el nombre de mis creaciones", dice, mientras hace orgullosa una demostración de tejido, pasando del punto realizado como si fuera con palillos, al crochet y luego, al telar con cuatro dedos.
"En hacer un cuello me demoro entre cuatro y cinco minutos", promete, mientras sus manos se mueven veloces agarrando una grusa lana calipso. Cuenta que antes tejía de manera tradicional, hasta que un día, de viaje con su familia, se le quedaron los palillos. Ante la imposibilidad de devolverse a buscarlos, empezó a jugar con la lana y sus manos. El resto es historia. O más bien, talento.
"Empecé haciendo cadenetas, cosas simples. Ahora les he estado enseñando esto a mis hijas y la menor sabe bastante, porque una tiene que dejar un legado, que no se pierda lo que se ha aprendido de generación en generación".
Anita muestra unos zapatitos de bebé cuya técnica para tejerlos era de su bisabuela, traspasándose el conocimiento manual por años hasta llegar a sus hijas. "Este no es un zapato cualquiera, aquí hay tradición. Hay quienes pueden preferir algo con marca o de tienda, pero en esto hay conocimiento".
Autodidacta
Kenia Silva tiene su stand de artesanía en madera, donde lucen llaveros, portallaves, adornos, lámparas, aritos y porta inciensos. "También hacemos trabajos personalizados", comentó la mujer detrás de Arikalados, emprendimiento familiar que también destaca en la última versión de la Feria de Artesanía.
Sobre la técnica, explicó que se trabaja calando la madera a pulso, con una caladora de banco. De este modo, se corta la silueta pasando la hoja tal como si fuera una máquina de coser. También hace pirografías o quemados en madera, una especie de lápiz que permite dar sombras a las creaciones.
"Todo lo aprendimos con mi marido a través de Youtube. Somos autodidactas totalmente, él empezó con esto como un hobby y luego pensé que podíamos dedicarnos a venderlos", recordó.
Y es que la llegada de un nuevo integrante a la familia, "el conchito", impidió que Kenia continuara trabajando apatronada y cumpliendo horarios, ya que debía dedicarle más tiempo a su familia. "Pense ¿por qué no hacemos para vender? Siempre he trabajado como vendedora, así que fue una buena opción para tener más ingresos".
Contó que para encargos o consultas, la pueden ubicar a través de las redes sociales de Arikalados. "Tenemos llaveros a mil, aros a dos mil, portallaves a tres mil y los que son con pirógrafo a cinco mil, así que invitamos a la comunidad a visitarnos".
Hace 22 años
La FIDA funciona desde hace 22 años y es un panorama recomendado para pasarlo bien en familia en Fiestas Patrias, ya que los diversos puestos no solo ofertan artesanía, sino también jugos y comidas.
Para reactivar la economía afectada fuertemente por la pandemia, los artesanos y expertos culinarios de la feria esperan a la clientela, de lunes a viernes, de 10 a 22:30 horas, y los sábados y domingos, hasta la 1:30 de la madrugada.