Debido a que las afecciones respiratorias son muy comunes y en su mayoría causadas por virus, el uso de antibióticos puede no estar recomendado. Esto genera gastos de salud y además resistencia bacteriana. Por lo que muchos de estos cuadros pueden ser tratados efectivamente con fitomedicamentos (medicamentos en base a plantas), pues contienen principios activos con acción broncodilatadora, expectorante, antiviral y antibacteriana.
En este ámbito, destaca la equinácea, una planta aceptada por entidades de salud en diversos países de Europa, Norteamérica y Asia, por sus propiedades, como inmunoestimulante, antiinflamatoria, antioxidante y cicatrizante. Puede ser utilizada como terapia coadyuvante y profilaxis de infecciones recurrentes del tracto respiratorio superior, tanto bacterianas como víricas.
Aunque se puede utilizar de manera doméstica en infusiones y otras preparaciones, lo más recomendable es la utilización de fitomedicamentos que ya tienen su dosificación y formas de empleo estandarizadas. Se debe tener en cuenta que estas especies vegetales presentan componentes activos que son irritantes para las mucosas y la piel expuesta.
Esta planta no es tóxica por vía oral, sin embargo, como la mayoría de las especies, no se deben utilizar por periodos de más de 8 semanas y no se puede utilizar de manera concomitante con fármacos inmunosupresores y citostáticos.
En este sentido, los remedios naturales sí pueden ser una alternativa viable para combatir algunas enfermedades respiratorias. A pesar del escepticismo de algunas personas, estas terapias presentan vasta evidencia científica que avala el uso medicinal de preparados en base a plantas y sus productos.
Maite Rodríguez
Académica Escuela de Química y Farmacia UNAB