Editorial
Ellos ahora nos enseñan
Este 21 de julio se recordó en diversas latitudes el Día Mundial del Perro. Se trata de una efeméride que nació en el año 2004, como una forma de rendir un homenaje a quien popularmente se le ha conocido como el "mejor amigo del ser humano".
La idea también es poder crear conciencia respecto a la existencia y cuidados hacia un animal en el que se reconocen valores que se espera que sean propios y caso exclusivos de las personas, de los seres humanos.
En medio de una sociedad tan compleja, cada vez más impersonal y en la que los hechos muestran que el ser humano retrocede a la ferocidad y los instintos, antes de avanzar en la senda de los valores que deben caracterizarla, el caso es que los perros no sólo parecieran inspirar sino que incluso, hasta enseñar.
Es por eso que en torno a estos animales se han creado leyes para su protección y para que se dignifique el trato. Una cuestión necesaria. Y es que cuando en un sentido, hay familias que incluso prefieren tener como "hijos" a estos animalitos de compañía, prodigándoles una serie de atenciones y cariños, hay millones de ellos que viven en las calles, en la más completa desprotección.
De alguna u otra manera, las sociedades hoy se puede ver reflejadas en el trato que les dan a sus perros. No se trata de tener que desplazar los esfuerzos y recursos que se entregan a las personas, por dárselas primero a los animales. Pero sí se trata de la forma en que los seres humanos se muestran como tales, reflejando con hechos si efectivamente somos dignos de ubicarnos en el pináculo de la civilización y de las especies.
Hablar de los perros hoy se relaciona con ideas como la compañía, la lealtad, el cuidado, la protección, la fidelidad e incluso el amor. Resulta paradójico que en no pocas ocasiones, hablar de un ser humano en ciertas circunstancias, puede incluso poner en entredicho estos valores.
Es por eso que efemérides como el Día Mundial del perro llaman a relevar no sólo la existencia de estos animalitos, sino que también la relación que se da entre los humanos y los canes y lo que evidentemente podemos incluso aprender de ellos.
"Paradójicamente, los perros en ocasiones muestran mejores valores que deberían ser de los humanos".