Trastornos músculo esqueléticos disminuyeron en pandemia
Prevalencia de estas patologías cayó a un 8% en los años 2020 y 2021 en Arica y Parinacota. 203 casos activos van desde que comenzó a subir la curva de los contagios y tasa de incidencia
Según datos de la Mutual de Seguridad, en el periodo 2017, 2018 y 2019, la frecuencia de denuncias de patologías musculoesqueléticas alcanzó un 43%, 42% y 45% respectivamente, no obstante, durante la pandemia la prevalencia cayó a un 8% para los años 2020 y 2021 en Arica y Parinacota.
Del total de patologías que representan los trastornos musculoesquelético de extremidades superiores, la epicondilitis o tendinitis de codo es la que alcanza la mayor prevalencia (47,3%), otras sinovitis y tenosinovitis (14,6%), bursitis de hombro (13,9%) y síndrome del túnel carpiano con un (11,6%). "Estas lesiones musculo tendinosas son más frecuentes en hombres que en mujeres", mencionaron desde la institución.
Por otro lado, las actividades económicas que mayoritariamente generan tendinitis corresponden al sector de construcción (37%), las que están relacionadas con la construcción de edificios, obras menores contratistas y obras de ingeniería; industria y manufactura (27%), donde las tendinitis están relacionadas con las actividades en aserraderos y cepillados de madera, elaboración harina trigo, fabricación de pan y productos de panadería, fabricación de partes y piezas de carpintería, fabricación de muebles de madera; y la actividad económica de comercio (12,6%), representado por ventas al por mayor de maderas, materiales de construcción, muebles y carnes etc.
Teletrabajo
Respecto a personas que se desempeñan en trabajos de oficina, desde la Mutual de Seguridad comentaron que "pueden reportarse molestias musculares como la cervicalgia que es el dolor en la zona del cuello, y la lumbalgia expresada como dolor en la región de la espalda baja. Estas dolencias se generan por la sobrecarga postural, principalmente, posturas estáticas".
Sobre el trabajo en casa o teletrabajo, que tan común se volvió en la pandemia, destacaron que "no se cuenta con las condiciones espacio físico para adecuar ergonómicamente un puesto de trabajo . En segundo lugar, la silla utilizada para ejecutar el teletrabajo muchas veces no reúne las condiciones de regulación de la altura del asiento, y no cuenta con respaldo adecuado que permita soportar la columna lumbar".