Una semana sin redes sociales baja los niveles de depresión y ansiedad
En el estudio de la Universidad de Bath participaron usuarios de entre 18 y 72 años que dijeron usar estas plataformas diariamente.
N.E.
Las redes sociales permiten contactarse con amigos, compartir fotos y videos, vender objetos en desuso, hacer encuestas y hasta jugar. Sin embargo, su uso puede afectar significativamente la salud mental.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Bath (Inglaterra) analizó los efectos de hacer una pausa de una semana en las redes sociales. Según el estudio, publicado en la revista científica estadounidense Cyberpsychology Behavior and Social Networking, esto permitió, que muchos de los participantes ganaran ocho horas de su semana, que es lo que generalmente destinan al uso de estas plataformas.
En cuanto a la salud mental, los primeros informes del sondeo, aplicado a 154 personas de 18 a 72 años que reconocieron usar redes sociales todos los días, reveló que los participantes a quienes se les pidió tomar un descanso de las redes sociales por una semana presentaron mejoras significativas en su bienestar, logrando una disminución de los síntomas de depresión y ansiedad. Esto, a diferencia de la parte de la muestra a la que se le solicitó seguir usando sus plataformas preferidas, entre las que se consideraron Instagram, Facebook, Twitter y TikTok.
A quienes se les solicitó hacer este break de redes sociales, declararon haber usado, en promedio, 21 minutos sus redes sociales durante esa semana. En tanto, el grupo de control destinó un promedio de ocho horas a esas plataformas recreativas.
"Muchos de nuestros participantes informaron efectos positivos de estar fuera de las redes sociales, con un mejor estado de ánimo y menos ansiedad en general. Esto sugiere que incluso un pequeño descanso puede tener un impacto. Por supuesto, las redes sociales son parte de la vida y, para muchas personas, es una parte indispensable de quiénes son y cómo interactúan con los demás. Pero si pasan horas cada semana desplazándose y siente que los está afectando negativamente, podría valer la pena reducir su uso para ver si ayuda", señaló Jeff Lambert, investigador principal del Departamento de Salud de Bath.