Editorial
Vertederos de ropa usada
Una serie de reportajes han dado cuenta de una forma de contaminación que es tan común y generalizada, como ignorada, particularmente en el norte del país. Las imágenes de enormes extensiones de ropa tirada en quebradas, en pleno desierto, impactaron. Esto, dadas las consecuencias que tiene en el medio ambiente este tipo de artículos, en los que abundan fibras sintéticas de difícil reciclaje o biodegradación.
Los cerros de ropa que se acumulan en el desierto son tanto o más desagradables y contaminantes que aquellos papeles y bolsas que se ven desparramados también por las grandes extensiones del norte grande del país, y que con tristeza se aprecian cuando se viaja por tierra a través de estas áridas vastedades.
A pesar de esta realidad, ciudades como Iquique y también Arica reciben mes a mes enormes cantidades de prendas de vestir usadas, de todo tipo, lo que las termina convirtiendo en una suerte de "basurero" de lo que se usa en otras latitudes.
En Arica no se vive un escenario tan dramático, pero no por ello se puede decir que en Arica se reciben también enormes fardos con ropa usada y no toda llega a la comunidad. Y por cierto, muchas de las prendas que llegan también terminan en la basura.
José Miguel Arriaza, director de la Escuela de Ingeniería Civil, Minas y Sustentabilidad de la Universidad San Sebastián, explica que "Chile es uno de los principales importadores de ropa de segunda mano de Latinoamérica, lo que obliga a tener un control más estricto de la misma".
Evidentemente aquí hay una cuestión que tiene que ver con la educación, la conciencia y las disposiciones para velar por el cuidado del medio ambiente. Un compromiso que parte desde el marco regulatorio, hasta lo que la misma comunidad pueda hacer, o dejar de hacer, para evitar que nos convirtamos en un basurero de ropa usada.
Y eso nuestra ciudad tiene que tenerlo muy presente, y considerarlo con mucha importancia y seriedad, porque Arica ya en alguna oportunidad fue el vertedero de aquello que era basura en otro país y que se pensaba que podía tener un nuevo destino en estas latitudes.
"Arica no puede volver a convertirse nuevamente en un basurero de lo que en otros países sobra".