¿Por qué permitir la esterilización en mujeres?
La respuesta a esta pregunta realmente es mucho más sencilla de lo que podría creer. Pero para convencerlo voy a dar una fundamentación más completa, en la cual, usted que lea, pueda juzgar por sí mismo.
La ligadura de trompas es un tipo de anticonceptivo. En el cual las trompas de Falopio se cortan, ligan o bloquean para evitar el embarazo. Este método se conoce como permanente, pero ciertamente en la actualidad la posibilidad de volver a tener hijos naturalmente es viable gracias a la reversión de esta cirugía, un procedimiento que permite revertir la ligadura de trompas de Falopio.
Ahora, el controversial problema es que la mayoría de doctores en la actualidad le niegan esta posibilidad a las mujeres que están seguras de querer tomarla. La única base sólida que tiene un doctor para cuestionar la decisión del paciente, es el arrepentimiento en el futuro, pero personalmente pienso que, si una mujer toma esta decisión, no es algo que toma a la ligera. Según especialistas en la reproducción asistida, solo 1 de 10 mujeres se arrepienten de la esterilización. Y esto se debe mayormente al cambio de pareja.
Si me permite opinar, como mujer a mi este problema me parece inaceptable, ya que nuestra sociedad aún en el siglo 21 sigue tratando a las mujeres de forma diferente, a lo que yo no puedo tomarle sentido, ya que la mujer debería tener la misma oportunidad y apoyo que el hombre en este tema. En mi punto de vista, si este tema fuera resuelto, beneficiaría a la comunidad en muchos aspectos, como, por ejemplo, es posible que haya una clara disminución de los embarazos no deseados, debido a las fallas en anticonceptivos.
A sí que, mencionando estos puntos importantes, le insto a usted que está leyendo a tomarse un tiempo para pensar en esto, ya que no va a tomarle mucho y es algo que considero importante concientizar, y preguntarse el por qué habría que negar esta opción a las mujeres, las que somos dueñas de nuestras propias decisiones y deseos. Puede que su punto de vista sea diferente al mío, pero cumplo con mi debe de hacer visible este problema poco tocado en la sociedad. Así que ahora que he contribuido con mi granito de arena, lo invito a que usted también lo haga, ya que soy consciente de que un problema de esta magnitud no es resuelto en su brevedad, pero podemos poner de nuestra parte para que sea escuchado.
Tamara Orellana
Arica, Chile