Mujer llamó al 133 para confesar que asesinó a su hijo
Un llamado telefónico alertó en la tarde del lunes a Carabineros sobre un crimen ocurrido en Villarrica que le había costado la vida a un niño de cuatro años. Quien llamó al 133 fue precisamente la madre de la víctima, confesando haberlo asesinado.
Tras desplegarse en el sector de Molco Bajo, Región de La Araucanía, los policías confirmaron la presencia de un menor difunto, quien presentaba lesiones que coincidían con una muerte por asfixia, tal como relató su madre, una mujer de 33 años que fue detenida acusada de parricidio y cuya formalización se aplazó para el viernes.
En el hogar del crimen vive también el abuelo de la víctima y padre de la victimaria, quien contó que ella sufre una depresión bipolar que se agudizó con el encierro por el covid.
Contó que él la cuidaba, pero por dificultades económicas debió salir a trabajar, y acusó que el Cesfam cortó su tratamiento por la pandemia, y que les era imposible tratarla de forma particular por el precio de las consultas.
"No hubo seguimiento. Fue una tremenda negligencia (...) No voy a renegar de ella. Esta caída horrible la tiene cualquier mujer en un estado de vulnerabilidad", dijo.