Editorial
Nueva ley sobre fuegos artificiales
Este domingo el Gobierno promulgó de forma Online la ley que sanciona como delito el uso, venta y fabricación de fuegos artificiales. Se trata de un cambio a la Ley de Control de Armas que sancionaba como falta con pena de multa estas acciones.
Sin embargo ahora estas mismas acciones se establecen como delitos, con penas de presidio en cuanto al uso, venta y fabricación de fuegos artificiales, y también en el caso de quien dispare armas de fuego, cohetes, petardos u otros proyectiles.
De esta manera, como lo informó al Gobierno, la ley permitirá sancionar más severamente, con cárcel y multas, los disparos injustificados de armas de fuego. La nueva norma responde a hechos que se han registrado en los últimos meses en el país y también en nuestra región.
Por ejemplo, un aspecto relevante fue lo que ocurrió la última noche de Año Nuevo, donde a pesar que la gran mayoría de los espectáculos pirotécnicos en el país fueron suspendidos, fue posible ver en ciudades como la nuestra verdaderos eventos particulares de fuegos artificiales. Estos hechos, sin control alguno, pueden provocar desde lesiones personales hasta incendios, como de hecho ocurrió en otros puntos de Chile.
Sin embargo, el uso de fuegos de artificio también se ha relacionado últimamente con el narcotráfico, y de ahí que sea un problema que preocupe de manera profunda a las policías. Es por eso que la nueva ley sanciona con mayor gravedad los delitos cuando, además, perturban gravemente la tranquilidad pública o infunden temor en la población. Las penas de presidio por estas conductas delictivas serán de 3, 5 y hasta 10 años de cárcel, explicó el Gobierno.
Y agrega que la medida cobra especial relevancia por el uso ilegal que se la ha dado a estos instrumentos como método para intimidar a la población por parte de bandas criminales.
Existe ya claridad, entonces, respecto a esta nueva ley. Ahora queda en la comunidad poder entenderla, acatarla y a los organismos competente, la fiscalización para que no sea letra muerta,.
"El uso, venta y fabricación de fuegos artificiales dejó de ser una falta para convertirse en delito".