Por la salud y la reactivación

Las aglomeraciones que se producen en los días previos a la Navidad y el Año Nuevo son un desafío enorme para mantener bajas las cifras de contagio de covid-19 en la región de Arica y Parinacota.

Si bien la autoridad sanitaria y la municipalidad pueden disponer de fiscalizadores en las principales arterias donde se desenvuelve la actividad comercial, si no hay una conciencia de la propia comunidad en la importancia del autocuidado, manteniendo sobre todo la distancia física y usando en todo momento las mascarillas, los rebrotes del coronavirus podrían ser una realidad inminente en el corto plazo.

Todos sabemos ya los costos de todo tipo que implican para una región como la nuestra, retroceder a una fase extrema de confinamiento. Un traspié en estas fechas, no solo sería malo para la salud de la población, sino que un puertazo a la necesaria reactivación económica regional.

En este nuevo escenario marcado por la pandemia, la educación sanitaria y las recomendaciones de autocuidado se transforman en algo fundamental, por eso se aplaude la campaña asumida por la Seremi de Salud, a través de sus cuadrillas sanitarias, las cuales se despliegan en diferentes rincones de la comuna para educar a la población sobre cómo mantener la guardia frente al coronavirus.

Por ejemplo, se han desarrollado interesantes intervenciones en la Feria del Juguete, uno de los lugares más concurridos por la comunidad en estas fechas, así como en los distintos balnearios de la ciudad.

Por otra parte, el seremi (s) de Salud, Jorge Guerra, recordó tanto a locatarios del comercio como a sus usuarios y usuarias, "utilizar de manera correcta y permanente la mascarilla, cubriendo boca y nariz, simultáneamente; mantener el distanciamiento físico, de al menos, un metro; realizar lavado frecuente de manos, y en caso de no tener acceso a agua, usar alcohol gel".

Con seguir estas simples recomendaciones, más allá de salvar la economía de Arica en estas fechas, puede salvar vidas, que es lo más importante, en una crisis sanitaria como no ha visto el mundo en años.

"Un traspié en estas fechas no solo sería malo para la salud de la población, sino que un puertazo a la necesaria reactivación ".

Cambiemos el chip

Un tema del que mucho se habla, pero sobre el que poco se hace es el de las políticas públicas de salud, que son necesarias para enfrentar las grandes amenazas que hoy ponen en peligro nuestra existencia como especie. Pienso en fenómenos como el cambio climático, la contaminación ambiental generalizada y más recientemente, los contagios por enfermedades desconocidas como el Covid, que es una infección derivada del virus SARS o Síndrome Respiratorio Agudo Grave, que causó la muerte de 10.000 personas a nivel global entre 2003 y 2004.

Han pasado 17 años desde ese brote epidémico y hoy - cuando la cantidad de fallecidos por Covid a nivel mundial es de 1.650.000 - estamos muy lejos de poder respirar tranquilos, ya que la pandemia sigue creciendo exponencialmente.

En Latinoamérica, con 7 millones ochocientos mil casos de Covid y 475.000 fallecidos, Chile contabiliza 550 mil contagiados y 16 mil muertes. En otras palabras tenemos aproximadamente un 5.05% de la población contagiada y un 2.72% de los contagiados han fallecido.

Para volver al tema central de esta columna, aunque pareciera que lo "normal" sería tranquilizarnos por los relativamente bajos índices de contagio y muertes, esto constituiría un optimismo pueril, ya que si la pandemia va a ser parte de nuestra vida durante un extenso período de tiempo, si seguimos "arreglando la carga en el camino" - como parece ser el caso de nuestra política de salud pública - las posibilidades de poder realmente controlar la enfermedad en el corto plazo serán escasas.

Así, aunque suene como una medida draconiana, la severa reducción de la libertad para realizar reuniones sociales, por lo que Angela Merkel ha sido reconocida mundialmente, es el camino a seguir para disminuir los contagios. Ahora, si existiera la disposición para hacerlo, sugeriría al ministro de salud, que promulgara un decreto sanitario de suspensión de todas las actividades de celebración de fiestas de navidad y año nuevo de 2020, autorizando solo actividades familiares, a celebrarse en forma privada y con un aforo máximo de 10 personas y no de 25, como se rumorea sería el caso la próxima semana. La medida sugerida puede sonar muy dura, pero una mano firme en la regulación de los contactos sociales, es esencial para evitar los efectos de una potencial segunda ola de la pandemia en los meses de verano, cuyas consecuencias no parecieran preocupar suficientemente a las autoridades.

"la pandemia va a ser parte de nuestra vida durante un extenso periodo de tiempo".

Jaime Gómez Douzet, Doctor en Filosofía

¡No son autopistas!

Siguen vecinos del sector Villa Altos del Mar incómodos con los ruidos de vehículos acelerando de noche, ya sea en Sotomayor, San Ignacio de Loyola o Eduardo Hoyos. Es que hay algunos que se creen toretos.

Campings reabren de a poco

De a poco iniciaron a reabrir los campings en Fase 3 de confinamiento. La Seremi de Salud hizo notar que se les exigen las mismas medidas que a restaurantes y condominios con piscina, para evitar cualquier contagio de Covid-19.

No solo compras navideñas...

Durante el fin de semana no solo los ariqueños aprovecharon de realizar las compras navideñas, sino que también varios se fueron a las playas. Hasta en las noches se vio bastante público aprovechando del mar y la arena.