Los mejores regalos son el estar con la familia, aseguran Ariqueños recuerdan su mejor Noche de Navidad resaltando esa magia eterna
Aunque haya diversas amenazas sobre la humanidad, expresan que en esas noches brotan la solidaridad, el cariño familiar y el recuerdo de los seres queridos.
Las navidades independiente de las situaciones por las que atraviesa el mundo sean guerras, desastres naturales y ahora la pandemia del coronavirus, tienen un sello y tradición que no cambia, según pasan las generaciones, aunque algunos piensan que se ha perdido un poco la inocencia.
Y en este contexto, casi todos guardan en sus corazones y mentes el recuerdo de una navidad especial, por lo general cuando eran niños y la fecha tenía esa magia de la llegada del Viejito Pascuero con el regalo soñado.
Varios ariqueños recuerdan así esta fecha o una de ellas que los marcó para no olvidar esa cena con el tradicional chocolate y pan de pascua.
El rector de la Universidad de Tarapacá, Dr. Emilio Rodríguez Ponce, recuerda que "sin duda una de las Navidades más maravillosas de mi vida es la de 1998 porque el 29 de noviembre de ese mismo año nacieron mis hijas Carmen y Olga. Vivíamos en un pequeño departamento en Madrid, con mi señora Liliana, ya que estábamos estudiando nuestro primer Doctorado. Fue una Navidad inolvidable que disfrutamos entre libros, biberones y pañales. La felicidad nos iluminaba a cada segundo; estábamos llenos de esperanza y de grandes ilusiones".
Rodríguez Ponce, reflexiona que "las Navidades son un tiempo prodigioso, porque reina el amor, la entrega y la generosidad. Estar en familia, compartir con la familia es lo más trascendental e importante. Por eso el regalo más grande que se puede recibir en Navidad es estar en familia, estar con los seres amados".
Mirando como gato
Para el senador José Miguel Durana Semir, las navidades cuando niño en particular, tenían mucho de aquello de "el gato mirando la carnicería".
Según revela, su padre José "Pepe" Durana, un conocido comerciante, tenía en aquellos años de bonanza del comercio local una juguetería y librería en calle 21 de Mayo con Bolognesi.
"Al negocio llegaban los mejores juguetes importados que no demoraban en ser vendidos por estas fechas mientras yo miraba y ansiaba que no se vendiera mi juguete soñado, una espectacular autopista de fabricación alemana", rememora.
Y cuando había perdido un poco la esperanza de contar con su regalo soñado, llegó una noche de Navidad, de las mágicas, en la que apareció en su casa la autopista.
"Era tan grande la autopista que la instalamos en casi toda una pieza y recuerdo que jugué tanto con ella que no me duró más de unos días por un problema con los transformadores", señala.
Pero, lo que siempre recuerda Durana es que "las navidades tenían y tienen una tradición de pasarlo en familia, cenando primero, con el pan de pascua, el chocolate y luego el abrir los regalos".
Pura solidaridad
Julia Fuentes es una madre de seis hijos que decidió cambiar el mundo del teatro por irse a vivir a Afassal de Taltape en la comuna de Camarones.
Junto a su esposo Hugo Gil, cuentan con un microemprendimiento de ecoturismo en el sector donde afirma que hay muchas necesidades de los adultos mayores y niños.
Por eso, la Navidad que más recuerda es una donde se vio impulsada a iniciar una campaña de ayuda en el lugar para los niños que nada tienen.
"Lo que recuerdo es la navidad donde empecé con esta ayuda a los adultos mayores y niños, somos las manos de muchos acá en el valle, somos las manos de Cristo, es un legado para nuestros hijos, solidaridad y bondad", afirma.
Y también resalta que "acá mis hijos han tenido que estudiar y aprender mucho, y en Navidad ellos mismos ayudan a preparar la torta navideña, pero lo que nos mueve como familia es ser solidarios".
Julia recuerda en particular una Navidad cuando comenzó con la ayuda a los lugareños y juntó con varias personas anónimas ropa y juguetes.
"Llegamos hasta un sector muy alejado del valle, con muchas necesidades, familias que poco o nada tienen y viven de lo que pueden cosechar. Entonces repartimos lo que teníamos y los juguetes a los pequeños y ver la cara feliz de una niñita al recibir una muñeca fue algo emotivo, imposible de olvidar. Para todos nosotros fue lo mejor de esa Navidad", relata.
Todos juntos
El profesor de Castellano, actor y músico, Miguel Durán Candia, casado con una colega del mismo ramo, Celinda Tapia, recuerda que "por motivos laborales trabajamos muchos años en Calama, y pasábamos la navidad lejos de nuestros familiares en Arica. Teníamos un árbol chiquito, y allí llegaba cada nochebuena el viejito a entregar los regalos a mis tres niños. El viejito fui yo, por supuesto caracterizado. Me di cuenta cuando mi hijo menor, Camilo, manifestó "el viejito pascuero tiene la nariz igual a la de mi Papi". El regreso a Arica nos permitió vivir, desde allí, las navidades con las dos familias: paterna y materna".
Mientras que para Rubén Saavedra, profesor e hincha acérrimo de San Marcos de Arica, su mejor Navidad la tiene graficada en una imagen "que representa mucho en mi vida. Es la primera navidad siendo abuelo. Estoy con mi nieta Matilda Ignacia Guzmán Saavedra, en diciembre de 2012".
"Fue una navidad inolvidable, que disfrutamos entre libros, biberones y pañales..."
Emilio Rodríguez Ponce
"El regreso a Arica nos permitió vivir, desde allí, las navidades con las dos familias: paterna y materna".
Miguel Durán Candia