El canario fue una visita ingrata y derrotó al Bravo
San Marcos cayó por dos goles a cero ante San Luis de Quillota, siendo sorprendido por la alta presión ejercida por el rival.
Un tiempo necesitó San Luis de Quillota para liquidar al Bravo por dos goles a cero en un resultado que antes del encuentro pocos vaticinaron, pero que fue incluso mezquino en cifras para las oportunidades que tuvo el equipo canario.
Al entrar ayer al gramado del mundialista estadio "Carlos Dittborn", San Marcos se alzaba como favorito por la campaña que venía realizando con dos triunfos en línea y en zona de liguilla. En cambio, el club de la ciudad de las chimimoyas, venía de una mala racha con 5 partidos sin abrazarse que generó hasta un cambio de entrenador.
Y es así que el estratega José María Martínez planteó un partido con mucha presión sobre las piezas claves del santo y junto con eso el rival se dio maña para generarse varias ocasiones de gol.
De esta manera a los 10 minutos, abre la cuenta el canario por intermedio del ex San Marcos, Francisco Bahamondes, cuyo remate pegó en un defensa y descolocó al buen golero ariqueño Brayan Manosalva.
Cuando se esperaba que reaccionara la celeste, a los 21 minutos, aparece Esteban Ciaccheri para colocar el 2 a 0 y la desazón en las huestes locales.
Pero eso no fue todo, sino que a los 24 del primer tiempo, Misael Llantén estrella un remate en el arco del guardameta del Bravo.
Por parte del local, fue el joven delantero Byron Monroy el que dispara a la portería del seleccionado chileno, Omar Carabalí, pero el misil sale desviado por sobre el travesaño.
Como contrapartida, el canario siguió presionando y a los 30 minutos, una mala salida del arquero local permite al jugador Sebastián Parada quedar a tiro de cañón, pero se recupera Manosalva y conjura el peligro para San Marcos.
Lapso final
En el segundo tiempo, el entrenador de San Marcos, Hernán Peña, se la jugó haciendo entrar a Mauricio Godoy y a Nahuel Donadell, buscando hacer más daño al rival.
Pero nuevamente, la visita pudo anotar el tercero por intermedio de Parada, pero reaccionó el defensor charrúa Robert Matías González.
El santo pudo encontrar el descuento cuando a los 72 minutos en una de las pocas jugadas bien hilvanadas en ataque, el argentino Jorge Pereyra casi llega a conectar un balón en el área chica.
Y la última clara para el local, la tuvo el delantero Fernando Isla (entró en el segundo tiempo), pero el meta canario atajó el balón y con ello se cerró una dolorosa derrota.
18 de diciembre es el próximo partido de la celeste ante Unión San Felipe en el "Carlos Dittborn".