Editorial
Convivencia vial
La semana pasada el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones anunció un plan para aumentar la seguridad en las calles, luego de la muerte de una ciclista en Santiago. Desde enero a septiembre 85 usuarios de bicicletas fallecieron en accidentes de tránsito, cifra que es 28% más alta la que se registró el año pasado.
Ante esta situación, la ministra Gloria Hutt adelantó la habilitación de 30 ciclovías, en un diseño que se preparó en conjunto con las municipalidades. También se dio a conocer la creación de un Plan de Acción de Seguridad Vial, que básicamente buscará educar al respecto a estudiantes.
La convivencia vial, como su nombre lo indica, tiene que ver con la relación que existe entre los múltiples usuarios y los distintos modos del sistema. Este solo hecho exige de cada uno respeto. Hay derechos y obligaciones que se deben resguardar con cuidado para que esta convivencia se acomoda y sobre todo, segura.
En el caso de los ciclistas es especialmente importante que conozcan sus necesidades y también vulnerabilidades en el sistema. Un ciclista es vulnerable debido a que, en términos simples la principal carrocería es su propio cuerpo. De ahí la importancia de la conducción atenta y siempre a la defensiva.
Pero también reviste una gran importancia que los ciclistas conozcan las normas viales y la ley de tránsito, porque aquí yo redunda en su propia protección. Un ciclista deja de ser peatón cuando va en su vehículo y dada esa circunstancia, no puede comportarse como una persona a pie ni tampoco puede esperar que permanentemente los conductores de vehículos motorizados lo vean así.
En este sentido, junto con la instalación y hasta la construcción de la infraestructura vial necesaria para los ciclistas, también es de enorme importancia la educación, un trabajo en el que pueden tomar parte distintos actores.
El anuncio de Transportes está en sintonía con una necesidad clave en la convivencia vial. Ahora, también es vital la fiscalización de las normas que se han dispuesto en la ley y que también tienen que ver con los automovilistas.
"La fiscalización y la educación son claves para que haya respeto y seguridad en el sistema".