Editorial
En un momento desafiante
Claramente el día del profesor celebrado ayer en el país ha sido único, distinto y seguramente muy inesperado, si nos remontamos a lo que hasta poco más de un año pasaba en Chile. Desde el estallido social, los profesores han debido enfrentar escenarios distintos y desafiantes.
La gran mayoría de los maestros y maestras de nuestro país han tenido que dejar de lado los pizarrones y el plumón -o en otros casos aún la tiza- para tener que enfrentar la enseñanza en un escenario distinto, marcado por la tecnología, el uso de internet, las aplicaciones y la informática.
No ha sido fácil, naturalmente. Ya no existe ese contacto con los alumnos y alumnas, no se han vuelto a repetir el ambiente y la relación que se da dentro de las aulas y estos procesos de enseñanza y aprendizaje se han vuelto muy distintos para profesores, como también para estudiantes.
Sin duda, estos escenarios requieren una mirada distinta, una que llegó de golpe y para la que no estábamos completamente preparados. No lo estaban ni siquiera los nativos digitales, tampoco los educadores; son escenarios abruptamente nuevos, distintos
El regreso a las aulas es todavía tremendamente incierto. De manera transversal se reconoce que las condiciones no están dadas de forma categórica. La pandemia que enfrentamos y el virus que la caracteriza, siguen liberando cada cierto tiempo nuevas sorpresas respecto de su naturaleza.
Es por eso que la paciencia, el compromiso y la vocación de los profesores y profesoras en estos tiempos son tan valorables. Son aquellas, entre muchas otras cualidades, las que han impulsado que la educación se mantenga, enfrentando las más diversas y hasta difíciles condiciones.
Como el caso de la profesora Isabel Rodríguez, cuya historia apareció ayer en La Estrella, y que puede ser una maestra, de tantas y tantos que han hecho todo lo posible y han dado lo mejor de sí, para que la educación y la enseñanza no decaigan en medio de esta crisis sanitaria.
Hoy, profesoras y profesores brillan por su vocación, su entrega y su capacidad de enfrentar la enseñanza con seriedad en medio de tanta incerteza.
"Los profesores y profesoras celebraron su día en medio del contexto distinto y exigente que ha impuesto la pandemia".