Personas mayores y resiliencia
Durante la pandemia de COVID-19, las personas mayores han sido señaladas como grupo de riesgo, desplegándose distintas estrategias orientadas a su protección física, mental y social. Sin embargo, ahora que ya han pasado meses de confinamiento, parece importante hacer un alcance respecto del bienestar psicológico de dicho grupo etario en comparación al resto de la población.
Si bien, no hay que desconocer que, al igual que en otros segmentos de edad, las personas mayores han manifestado problemas de salud mental debido al aislamiento físico y/o social (en particular sintomatología de carácter ansiosa), es importante destacar que estudios internacionales y nacionales muestran una tendencia en la cual, al ser comparados con personas más jóvenes, los mayores presentan menos síntomas depresivos (desesperanza, desinterés o falta de energía) o ansiosos (problemas de sueño o preocupación excesiva recurrente). Las causas y mecanismos que explican este fenómeno pueden ser variados y ciertamente serán objeto de discusión e investigación, pero es importante reconocer y relevar que las personas mayores cuentan con recursos psicológicos que les permiten enfrentar el confinamiento de una manera diferente y, al parecer, más adaptativa, lo cual a su vez refuerza la importancia de pensarlos y tratarlos sin la visión edadista que prevalece en la sociedad actual.
Claudia Miranda
Profesora Doctorado en Ciencia de Enfermería U. Andrés Bello
Investigadora MIDAP