La fauna local aprovecha el confinamiento humano
En las Cuevas de Anzota se observó un gran número de lagartos, al no haber visitas de turistas.
Mucho se ha visto sobre la aparición de animales en lugares donde comúnmente no se les observaba debido a la presencia humana tras algún tiempo de cuarentena alrededor del mundo. Arica tampoco es la excepción a este fenómeno, hace alrededor de una semana se había difundido un vídeo del personal a cargo de Cuevas de Anzota donde en el mismo estacionamiento, un gran número de lagartos se encontraban cómodos a plena vista.
Ayú San Martín, director ejecutivo de la Corporación Costa Chinchorro, explicó que "hemos observado como la fauna del lugar ha ido poco a poco haciendo uso del espacio que cuando era visitada (tenemos un promedio de 400 personas diarias), se escondian durante el día, pero ahora como no hay personas salvo nuestro equipo que son 4 personas, hay una posibilidad que el lagarto de cuatro bandas, las nutrias o chungungos, cangrejos, lobos marinos y la gran cantidad de aves han aumentado considerablemente. Estamos trabajando con la Universidad de Tarapacá para hacer un levantamiento de línea base de la avifauna existente en Anzota, estabamos en proceso hasta que se produjo esta crisis", contó.
Humedal
Desde el otro extremo de la costa, Jorge Abarca, biólogo académico de la UTA y parte de la agrupación Observadores de Aves, contó que en el humedal del río Lluta, "lo que observamos ahora es que las ciudades quedaron sin gente en las calles, lo que es un factor que motiva a reconocer nuevos territorios en silencio, por lo tanto es algo que debemos investigar, como esta nueva realidad está generando situaciones de avistamientos inesperados, Nosotros no hemos visto porque estamos en casa, pero las personas me mandan videos para preguntar y efectivamente se observa más ejemplares atravesando el humedal o poblaciones más grandes de aves, pero eso hay que investigarlo de manera científica para poder afirmarlo con datos duros", explicó.
En tanto, desde la Gobernación Marítima, el biólogo Cesar Ceballo, indicó que "sobre el ambiente marino de la ciudad, no hemos constatado un aumento en la presencia de fauna marina debido a la escasa presencia humana (efecto antrópico)".
400 visitantes al día en promedio estaban registrando las Cuevas de Anzota.