Emprendedora le dio aroma al choclo lluteño
Taoma es el nombre del negocio que una ariqueña sacó adelante, ofreciendo jabones con identidad local.
El mesón en el que Rosa Gutiérrez exhibe sus productos, podría ser el de una verdulería, sin embargo, el aroma que emana del lugar no es el típico de estos lugares.
Coloridos morrones, ajíes cachos de cabra, choclos lluteños, paltas y limones comparten espacio con frutas como la sandía, la maracuyá, guayaba y frutillas. De cada uno se desprende un olor suave, fragante.
Rosa Gutiérrez comenzó en febrero de este año con la fabricación de jabones artesanales con identidad regional. Taoma es el nombre de su emprendimiento y ella, aseguró, es la diseñadora, fabricante de los moldes que sirven para representar pequeñas frutas y verduras aromáticas.
En solo meses, a los jabones en barra sumó una línea especialmente ideada para varones y jabones en mouse, que se comercializan en frascos de vidrio.
"La idea es que todo sea original, por ejemplo, los mouse vienen con temática de playa. Tenemos el jabón Playa Chinchorro que incluye tortugas, considerando que ha habido avistamientos en ese lugar. El jabón La Lisera es un frasco con conchitas. También tenemos las llamadas compotas, que son frascos llenos de jabones de alguna fruta en particular como la compota de frutillas o limones", contó.
El próximo desafío de la emprendedora es crear un molde de melón tuna, con la textura de la cáscara. "También tengo jabones con forma y textura de piedra, con geoglifos de la zona", remató.