Con todos los grandes avances de la tecnología y en particular en la informática, hoy existe el photoshop, programa que permite editar las fotografías, mejorando notoriamente al fotografiado (a), sin arrugas, mejor color, de figura apolínea, sin celulitis, es decir con cero imperfecciones, es tanto que al mirar por ejemplo las portadas de las revistas papel couché, la verdad es que los años no pasan por los famosos (as), incluso son tantos los "refresh" que los transforman en otras personas, e incluso a veces son tantos los intentos por mejorarlos que les quitan una pierna ó les agregan un brazo, lo curioso del caso es que los mismos "reparados", después aparecen declarando que los arreglos mediante el photoshop son de responsabilidad exclusiva de la revista, porque ellos no fueron consultados, ¡Andaaaa!...
Lo anterior también se ha usado masiva y exageradamente en las campañas políticas, todos los candidatos en los carteles muestran una eterna sonrisa, sin arrugas, "chic to chic" juntos a otros remozados "viejos estandartes de la política", también gracias al mismo photoshop...
¿No le parece a usted, que NO debería permitirse en el caso de candidatos políticos que truquen su cara, eso es definitivamente publicidad engañosa, ya es demasiado con la cantidad de promesas que ofrecen, que ni ellos mismos se las creen, para que además se envuelvan en un brillante papel de regalo...?
Pero lo más decepcionante, es cuando ya son elegidos (as), y uno al poco tiempo se encuentra con ellos (as) en persona, parece que de un segundo para otro, se les vienen tooodos los años encima de una vez, pero ya es tarde, ni el Sernac, ni con la boleta, ni con la mismísima foto que los (as) mostraba muy diferentes en "las palomas callejeras", se pueden devolver ni menos cambiar por otro(a).
Luis Soler Milla