Reacciones ante catástrofes
Las particularidades que tiene Arica, y nuestra región, como una zona extrema, hacen que la gestión de prevención y emergencias ante una catástrofe sea crítica. Se requiere un alto grado de preparación y especialización, junto con coordinaciones indispensables y bien planificadas. Junto con los organismos del Estado, Bomberos de Chile cumple con un papel muy importante a la hora de atender a la comunidad cuando ocurren grandes emergencias.
Es por eso que ayer, en una nueva versión del ciclo de desayunos Visión Regional, la presencia del presidente nacional de los Bomberos de Chile, Raúl Bustos Zavala, contribuyó a presentar no sólo los esfuerzos y el trabajo que ha realizado la institución en el país para estar cada vez mejor preparados ante las contingencias que les compete atender.
El encuentro también ayudó a ver la necesidad de que los organismos del Estado, privados y la sociedad nacional en general, conozca bien la especialización que ha alcanzado la institución, como también la necesidad de apoyarla en aquello con lo que Bomberos simplemente no puede, como es movilizar personal o equipamiento a zonas extremas, como la nuestra.
En el fondo, lo que propone Bomberos es que la región y en general, el Estado no escatime en esfuerzos para aprovechar todo el potencial y la trayectoria que ha cimentado esta institución, para afrontar grandes catástrofes.
En su exposición, Bustos hizo un llamado a las autoridades, para que no esperen extensas evaluaciones antes de enfrentar catástrofes como los terremotos. Es mejor contar con los medios lo más pronto posible, que tener que esperar después reacciones tardías. Esto, es especialmente importante cuando se trata de equipos para el rescate de personas.
La institución busca hoy aprender de las experiencias naciones e internacionales, y a la vez, ajustarse a los estándares mundiales para enfrentar las grandes emergencias. Son experiencias que pueden ir cambiando paradigmas y formas de proceder, culturas al fin y al cabo, sin que necesariamente sea la catástrofe la que nos termine obligando.