Por el delito de amenazas y daños en el contexto de Violencia Intrafamiliar, fue formalizado un hombre de 42 años. Ayer, cerca del mediodía ingresó a la sala de audiencia del Tribunal de Garantía y al sentarse, de inmediato realizó una denuncia y solicitó una investigación, la cual consistía en señalar que fue golpeado en la cabeza por un funcionario de Carabineros.
Sin embargo, una vez que el fiscal Alex Ormazábal empezó a relatar los hechos de su detención y el testimonio de la propia víctima, su madre, una mujer de 70 años, quedó en evidencia su engaño.
Los hechos
Según los antecedentes expuestos por el fiscal, el hecho se registró a la una de la madrugada de ayer, cuando el imputado llegó en estado de ebriedad a la casa de su madre, ubicada en 18 de Septiembre. A patadas sacó de su base la puerta e ingresó al inmueble y a la habitación de su mamá que estaba durmiendo.
Empezó a insultarla y amenazarla que la golpearía; aterrada salió corriendo y su hijo detrás de ella, pero para su mala suerte al bajar la escalera perdió el equilibrio y se cayó, quedando tirado en el suelo.
La mujer llamó a carabineros, quienes al trasladarse al lugar encontraron al hombre con su cabeza llena de sangre. Fue trasladado al Servicio de Urgencia del Hospital Regional, resultando con 18 puntos en su cabeza y con un traumatismo superficial.
La propia víctima relató que su hijo ingresó de manera agresiva a la vivienda, la amenazó con golpearla y al subir la escalera se cayó pegándose la cabeza; además la mujerseñaló que está atemorizada, que vive con terror a que su hijo le pueda hacer algo, por tal motivo el fiscal solicitó como cautelares la prohibición de acercarse a la víctima y el abandono del hogar común, petición que fue acogida por el juez Rodrigo Urrutia. Quedó en libertad y solo podrá ir a buscar sus pertenencias acompañado por carabineros.
Alejandra Solis Araya
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