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Advierten epidemia por el uso del cigarrillo electrónico

El fenómeno afecta a más de 3.6 millones de menores de edad de todo el mundo.
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Agencia AP / V. Iturriaga F.

El cigarrillo electrónico constituye hoy la sustancia de mayor riesgo usada por los adolescentes, según las autoridades estadounidenses, que dicen que marcas como Juul y productos similares se propagan con mayor velocidad que los cigarrillos tradicionales, el alcohol, la marihuana y otras sustancias.

El "vapeo" adolescente se ha vuelto una epidemia de carácter mundial, donde más de 3.6 millones de menores de edad consumen nicotina a través del uso de los cigarrillos electrónicos, y sin embargo, nadie sabe cuál es la mejor forma de ayudar a los adolescentes que pueden ser adictos a la nicotina.

Si bien se han tomado algunas medidas para evitar que los dispositivos lleguen a las manos de menores, no se habla casi de cómo tratar la adicción a la nicotina en chicos de hasta 11 años de edad. Es posible que algunos logren dejar el cigarrillo sin ayuda de nadie, pero los expertos coinciden en que a muchos les costará y tendrán síntomas de ansiedad, irritabilidad, problemas para concentrarse y una pérdida de apetito.

Los médicos que tratan a pacientes jóvenes tienen varios dilemas: las terapias contra el cigarrillo, como los parches y los chicles de nicotina, no se pueden vender a los menores porque no se han hecho suficientes experimentos y los resultados son pobres. Además, los jóvenes tienden a pensar que es imposible hacerse adictos al cigarrillo electrónico y no tienen incentivos para dejarlo.

Susanne Tanski, experta en prevención del tabaco de la Academia Americana de Pediatría, señaló que "los adolescentes tienen sus propias ideas acerca de lo que funciona con ellos y hacen lo que les viene en gana". "Necesitamos desesperadamente estudios que digan lo que puede funcionar en esta población", agregó la especialista.

Desde su salida a la venta en Estados Unidos en el 2007, el cigarrillo electrónico y otras máquinas de vapeo se propagaron en forma desmedida y son un negocio de 6.600 millones de dólares. A su expansión ayuda la existencia de aparatos pequeños, fáciles de esconder, que vaporizan una cantidad suficiente de una solución con altos niveles de nicotina y se usa con sabores como vainilla, mango y caramelo.

Es por lo mismo que los cigarrillos electrónicos ya son considerados una plaga en las escuelas de Estados Unidos, donde las cifras de gobierno señalan que uno de cada cinco estudiantes de secundaria aseguran haber vapeado el mes pasado.

Dejar de fumar es un proceso complicado. Más del 55% de los fumadores adultos trataron de dejar el cigarrillo el año pasado y sólo el 7% lo pudo hacer, según las cifras. Ningún método para dejar de fumar ha dado resultados satisfactorios por ahora, como así tampoco las terapias psicológicas.

La basura electrónica global crece

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La producción de desechos y la contaminación ambiental han sido temas contingentes ya por muchos años a nivel mundial, dando pie a múltiples iniciativas de preservación del medio ambiente.

Una de las aristas de esta área tiene que ver con la basura electrónica, la cual ha alcanzado niveles alarmantes de acuerdo a las más recientes cifras.

Según datos entregados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), el año pasado se produjo en el orbe un cantidad de basura electrónica cercana a las 50 millones de toneladas, cantidad que si se quisiera dimensionar equivaldría a unas 4.500 torres Eiffel.

muy tóxico

El problema latente de esto es que este tipo de desechos puede ser sumamente tóxico, como también puede resultar perjudicial para el planeta, en vista de que no es biodegradable.

Sin embargo, se han visto posibles soluciones a este problema. El director del programa de la Universidad de las Naciones Unidas para Ciclos Sostenibles, Ruediger Kuehr, comentó que "necesitamos cambiar los hábitos cuando prevemos que en 2050 se generen 120 millones de toneladas de basura electrónica si no hacemos nada. El informe demanda una nueva visión basada en la economía circular y la cooperación entre grandes empresas, pymes, consumidores, instituciones y el mundo académico".

Esto implica que habría que reutilizar los desechos de este tipo, aspecto que de acuerdo al informe de la ONU y el FMI se estaría haciendo formalmente con solo el 20% de la basura electrónica del mundo.