Así nació el primer museo geológico de la región
Ya fue inaugurado el recinto de Belén, que acoge 120 piezas, como el esquisto y la esmeralda. Ojo que es gratuito y hay ejemplares inéditos en esta parte del país.
Aproximadamente 1850 millones de años tiene la formación geológica conocida como esquisto, una de las tantas maravillas que se puede encontrar en el recién inaugurado Museo Geológico de Belén, zona rica como tarea educativa para la ciudadanía y poder comprender los yacimientos minerales.
Son 120 muestras geológicas que los visitantes a este pueblo ubicado a 140 kilómetros al este de Arica, podrán disfrutar gratuitamente al visitar el museo, encontrándose con un pintado a mano de un plano geológico a escala de la región y de Tarapacá, además de un salón con 9 vitrinas de muestras de rocas y minerales del norte de Chile, en la cual sobresalen una especie denominada esmeralda (Colombia) y otra de calcosina de Chuquicamata, con data de 1970.
David Pacci León (78) es el geólogo fundador de esta iniciativa, que con recursos propios quiso dejar un legado en su tierra natal, ya que es un beleneño que tuvo que partir desde muy joven (9 años), para poder estudiar tanto en la básica (preparatoria), como la secundaria y los estudios superiores.
Una de las razones de la creación de un Museo Geológico en su tierra, nace de la necesidad de poder transmitir el conocimiento, ya que su profesión ha permitido incentivar a diversas generaciones de jóvenes en aprender la historia de un pueblo, que se encuentra a más de 3200 metros de altitud y que es uno de los pocos asentamientos fundados por los españoles, en 1625.
"Los beleneños siempre estuvimos comprometidos con nuestra tierra. Todos los avances, sean tecnológicos, viales o comerciales, los realizaban nuestras propias mujeres y hombres. No se le pedía ayuda a ninguna autoridad, trabajamos en comunidad como era costumbre, y este museo es un incentivo más para que algún paisano siga esta linda profesión", comenta.
10 mil años
Cabe destacar que en el poblado de Belén existen sitios arqueológicos que acusan presencia humana desde hace 10 mil años, según consta en estudios realizados, lo que es imposible imaginar para una persona común por la cantidad de tiempo.
El Museo Geológico de Belén es un testimonio del empuje y generosidad de sus habitantes, quienes realizaban tareas titánicas para llevar el progreso al pueblo, como el traer los materiales para la construcción de la escuela pública (1924) o que Belén fue el primer pueblo en la precordillera en tener luz eléctrica, gracias a un motor electrógeno que Bélgica donó para sus habitantes (1952), y que se trasladó desde el puerto de Arica, donde las y los beleñenos pusieron sus hombros, sus manos y fuerzas para tener en el pueblo una mejor calidad de vida.
David Pacci León comenta que el aporte cultural ante al auge del desarrollo turístico es una alternativa que el Museo puede traer, y así conocer más de la historia e idiosincrasia del Pueblo y sus habitantes, ya que cuenta con redes del Camino del Inca o las diversas fiestas religiosas, donde se mezclan las costumbres ancestrales y la creencia cristiana, con una arquitectura de adobe y calles empedradas y dos iglesias del siglo XVII, entre otras maravillas que son reliquias históricas para que el visitante pueda disfrutar.