Mucho amor y lápices regalados: las cábalas para rendir una buena PSU
Ayer, los jóvenes reconocieron salas para rendir hoy a las 9 de la mañana, la primera evaluación para ingresar a la U.
Diez minutos después de que se abrieran las puertas del Liceo Octavio Palma Pérez para comenzar con el reconocimiento de salas, María Francisca Gutiérrez, apurada, le dice a su madre que la espere en la puerta.
Ahí, mientras revisa la hora en su celular, la madre de la joven admitió estar más nerviosa que su hija, ya que hoy rendirá la Prueba de Selección Universitaria (PSU) para ingresar a Medicina si es que el puntaje le alcanza. El plan B es Enfermería y el C, Nutrición.
"Siempre le gustó la Biología, es bien matea, pero a veces los nervios traicionan y sé que está muy ansiosa, por eso la acompañé a reconocer sala. Ella me lo pidió y yo feliz. Después de esto iremos al cine para que se distraiga un poco", comentó Elena Robledo, la madre de la joven.
Como María Francisca, varios jóvenes llegaron acompañados de sus padres ayer al proceso previo a la rendición del examen que determinará el posterior ingreso a la universidad. Para muchos estudiantes, el sentirse acompañados y contenidos por su círculo más cercano fue vital a horas de dar la PSU.
Con el pololo
Jocelyn Robles es egresada del Liceo Antonio Varas de la Barra, establecimiento del cual salió con la carrera de Gastronomía. Ayer llegó a reconocer sala junto a su pololo Erick, su hermana y su pareja, todos acompañándola en este decisivo paso.
"Quiero estudiar Educación Parvularia y si no quedo, podría ingresar a un CFT. Estoy súper nerviosa, hasta hace poco estuve estudiando y siento que quizás no estoy bien preparada, pero tengo confianza y fe", dijo.
Su grupo de apoyo la esperó afuera del establecimiento mientras ella chequeaba el aula en la que hoy deberá rendir el examen. "No la podré acompañar mañana, pero seguro me contará por teléfono cómo le fue", añadió Erick.
El regalo más bonito
Yean Carlos Jiménez y Francesca Bruna, egresados del Colegio Centenario, aseguraron que hasta último minuto tuvieron el apoyo de los profesores de su colegio, quienes estaban disponibles para responder las inquietudes a través del Wathsapp.
"Si tenemos una duda, tomamos una foto y se las mandamos. Ellos están siempre dispuestos a ayudarnos", dijeron.
Para hoy, ambos egresados rendirán la prueba con lápices que les regalaron compañeros de cursos menores, esta es la cábala para dar un buen examen, según comentaron.
"En el colegio hicieron una actividad en la que compartimos con los niños más pequeños y ellos nos dieron unos lápices especiales para dar la PSU, que llevaremos mañana (hoy)", aseguraron.
Un ritual similar es el que tendrá Nicole Astudillo, quien marcará las respuestas con un lápiz que le regaló su abuelita. "Ella me lo dio para que me fuera bien en la prueba, así que seguro saco puntaje nacional", comentó entre risas.