Mario Narváez V.

Hace cuatro años, Andrea Villalba, subprefecta y actual jefa de la Brigada de Delitos Sexuales y Menores de la PDI de Arica, vio que algo más de vida podía darle a los tres autos policiales de juguete que tenía en su casa y quizás, sacarle mayor provecho a las réplicas que estaban dando vuelta por ahí en su domicilio.

Por lo mismo, la oficial comenzó a ser más minuciosa y vez que pasaba por una tienda, viajaba al extranjero o vitrineaba en cuanto local podía, se percataba si había algún modelo de carro policial que fuera distinto a los tres con que comenzó.

Estamos a noviembre de 2018 y ya tiene 163 ejemplares de todos los tipos, sin repetir, y en su oficina del Cuartel Belén.

Por el marco de la ventana están "estacionados" vehículos inspirados en los años 40, uno de la policía italiana, uno adaptado del que utilizaba Toretto en Rápido y Furioso, y hasta un transformer.

"Si te fijas, ninguno se repite. Hay metálicos, de plástico, de cartón y de losa, pero todos diferentes y originales", cuenta.

"Al principio uno nunca piensa llegar a una cifra como tal, pero por ejemplo tengo familiares e incluso colegas que viajan y ven autos policiales en tiendas del extranjero y se acuerdan altiro de mí. Eso se agradece".

- ¿Cómo es eso que hasta el portalápiz sea de un carro policial, un pendrive sea de una camioneta PDI y que sus chocolates sean con ese concepto?

- Lo del portalápiz, me lo regaló mi hija. Fue para un cumpleaños que me dijo que tendría un regalo pequeñito, pero que sabría que me gustaría y los de los pendrives, los regaló la institución.

- ¿Alguno que le falte en su colección?

- Me encantaría tener uno de cristal, transparente; ese es un sueño para esta colección.

- ¿Se le ha perdido o le han robado alguno?

Ninguno... Ahh, pero hay uno que hace poco se me desapareció, cuando mi nieta vino a la oficina. Me descuidé y de repente la veo tan contenta comiendo un chocolate... Adivina cuál era.

- ¡No!

- Sí, el chocolate en forma de carro policial... todavía la molesto, jajajá.