Rosa Gattorno, la hermana que vive en el corazón de Jesús y de Santa Ana
Por unos días, una pieza ósea perteneciente a la fundadora de las hermanas de hábito gris, estuvo en Arica.
Un Cristo crucificado que en su pecho guarda una pequeña parte de un hueso de la fundadora de la congregación religiosa Hijas de Santa Ana, llegó desde Italia a Arica el martes para ser venerado.
Se trató de restos de la madre Rosa Gattorno, beatificada en el año 2000 y que creó la congregación de religiosas de hábito gris, cuya presencia en Arica se materializa además en el Colegio Italiano Santa Ana.
"Para nosotros esta posibilidad fue un regalo de Dios. Si bien, creemos que el espíritu de la madre siempre está aquí, el hecho de recibir esta reliquia representó la certeza de que ella fue una persona de este mundo y que fue capaz de hacer la voluntad de Dios", comentó la hermana Adela Espinoza, directora del establecimiento.
La reliquia fue visitada por alumnas, ex alumnas y funcionarios, además de la comunidad en general, quienes realizaron acciones de gracias y oraciones en su nombre.
"Esta visita especial y significativa vino a reforzarnos y animarnos con todo lo que está pasando en la Iglesia y con la crisis de fe que se vive en el mundo", expresó la directora.
La hermana detalló que el crucifijo fue diseñado porque para la fundadora de la congregación, la cruz representaba la razón de su vida y muerte. "Por eso la reliquia está en el corazón de Jesús, que es el lugar donde habita Rosa Gattorno".
¿quién fue?
Rosa Gattorno nació en Génova el 14 de octubre de 1831. La hermana Adela contó que el Señor le pidió a madre Rosa formar una familia religiosa, algo impensado, pues era casada y madre de tres hijos. Sin embargo, Dios le comunicó que todos los imposibles se convierten en posibles cuando uno se pone en las manos del Señor, y al pasar el tiempo, empezó a nacer la congregación.
Gattorno empezó por ayudar a los más necesitados, visitando a los enfermos y los hogares o asilos de los ancianos. En 1862, se dice que recibía el don de los estigmas.
"Así nos expandimos por los cinco continentes, cumpliendo 152 años en el mundo y 125 en Chile. El primer país al que llegaron las Hijas de Santa Ana fue a Bolivia, después llegan Chile, específicamente a Iquique y luego a Antofagasta", contó Espinoza.
Lamentablemente, Rosa Gattorno nunca conoció este país ni tampoco América. Aún así, su presencia al menos en Arica, es latente.
Camino a la santidad
La directora expresó que los restos de la madre descansan en Italia. En uno de los procesos que se realizan para optar a su canonización se revisó las condiciones del cuerpo, exhumándolo y siendo analizado por expertos.
"Son estudios necesarios para indicar que ella no fue una persona común y corriente, sino que fue alguien que con su vida se ha santificado", dijo.
De estas muestras se sacó la reliquia, el resto óseo que no está determinado a qué parte del esqueleto pertenece. Eso sí, es una reliquia de primer grado, es decir, un resto físico de un beato o santo. También las hay de segundo grado, que corresponden a cualquier objeto utilizado con frecuencia, mientras que la de tercer grado es cualquier objeto que haya tocado una reliquia de primer o segundo grado.
"Esto fue como tener un pedacito de Dios", finalizó la hermana.