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Así se va armando la plaza de los juegos en forma de caracol y las mesas de ajedrez

Antes de Fiestas Patrias estaría lista la Plaza Ópalo, en la población donde los pasajes llevan nombres de minerales y piedras preciosas.
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Nació hace 46 años, pero hace uno partió su remodelación, después de cuatro décadas donde era un peladero con una que otra área verde y bancas improvisadas.

La Plaza Ópalo debe su nombre a un pasaje de la Población Adrián Barrientos, pero también a los de las distintas arterias que las rodean, de las cuales todas tienen nombres de piedras preciosas y minerales similares al cuarzo.

Tal vez por eso los pobladores de ese sector siempre consideraron al espacio como un diamante en bruto, pero que hoy por hoy presenta un 95% de avance y que tendría su corte de cinta en la primera quincena de septiembre.

El lugar cuenta con mesas de ajedrez, particulares juegos infantiles en forma de caracol y oruga, y una superficie destinada a áreas verdes de 960 metros cuadrados, como también cierre perimetral de multicancha, considerando la reparación del mobiliario deportivo y muros perimetrales.

"Hay una preocupación por la seguridad de los niños en la zona de los juegos infantiles y de los accesos para los adultos mayores que visitarán la plaza. No hayamos la hora de inaugurarla con una gran fiesta", dijo Carmen Guerra, presidenta de la Junta Vecinal 51 por 13 años, "lo que no significa que sea el número de la mala suerte", agrega.

La obra implica un financiamiento de 282 millones de pesos y cuyo diseño considero lineamientos de accesibilidad universal, que se ven reflejados en la incorporación de la ruta accesible en sus pavimentos, mobiliario para diferentes edades y grados de discapacidad. "Estos recursos dan cuenta del mejoramiento y consolidación de un espacio público con accesos para circulación peatonal, zonas de descanso, iluminación, todo bajo un estándar de diseño que otorga calidad y seguridad a las personas que podrán disfrutar de su plaza", explicó el seremi de Vivienda, Giancarlo Baltolu.