Defender, proteger y cuidar la Educación Pública
Defender la Educación Pública es tarea de todos: de políticos, administradores, funcionarios, directivos, profesores, estudiantes y sus familias. Esto, por la sencilla razón de que somos parte de un sistema altamente frágil, vulnerable, donde es muy fácil atacar, enlodar y criticar la gestión, o desconocer los logros, más aún cuando estos son abundantes y en algunos casos, altamente relevantes. Pero atacar y criticar es fácil, y cualquiera puede hacerlo, tal como vemos, semana tras semana, cómo los tres concejales de una misma coalición, movidos por desconocidos intereses políticos, tratan de enlodar la imagen de directores o funcionarios, sin piedad, sin razones, sin evidencias. Del 90% de las acusaciones que estos tres concejales plantean en forma artificiosa, jamás han llegado a algo concreto, y queda en evidencia que actúan de manera orquestada y predispuesta, atacando a nuestro frágil sistema, dañando la honra de Funcionarios, Directores o Profesores: no les importa nada, sólo obtener un mezquino aplauso infundado, basándose para ello en quejas espurias, verdades a medias o descalificaciones que muy pocas veces tenemos la oportunidad de desmentir pues no dan espacio para ello, no consultan ni indagan, faltando a todo principio de bilateralidad, de ecuanimidad, de justicia y de ética básica para ocupar cargos públicos. Tratar insistentemente de obtener notoriedad a cualquier precio, utilizando un comentario, o una queja de cualquiera de los más de 50 mil usuarios que conformamos esta gran familia DAEM, es hacer política de muy bajo nivel. Pero, hay que reconocer que también existen autoridades justas, ecuánimes, probas y templadas, que saben alzar la voz ante estas injusticias y malas prácticas, que velan por el buen trato, la honra y el bienestar del que todo funcionario tiene derecho, movidos por la justicia y protección de la Educación Púbica, que debería ser tarea de todos.