Un discurso escrito a mano fue el que pronunció el Ministro de Defensa, Alberto Espina, durante el desfile cívico militar realizado ayer con motivo de un nuevo aniversario del Asalto y Toma del Morro. En él hizo referencia a la batalla, que representó un acto heroico de las Fuerzas Armadas que dejó como legado un inmenso amor por la patria.

Las hojas escritas de puño por la autoridad, fueron leídas ante cientos de personas que participaron del homenaje al pie del peñón, muchas de las cuales no pudieron contener las lágrimas al escuchar los acordes de Los Viejos Estandartes, mientras el desfile tomaba fuerza con la participación de militares y agrupaciones civiles.

"Me emociona esta fecha. No es lo mismo vivir un 7 de Junio en Arica que en cualquier otra ciudad, lo digo yo, que he estado en otros lugares. Acá se respira patriotismo, un sentimiento que eriza la piel", destacó Manuel Garrido, uno de los asistentes a la jornada.

Luego del paso de las Fuerzas Armadas ante las autoridades, fue el turno de decenas de huasos y chinas, quienes al ritmo de la cueca, agitaron sus pañuelos en la avenida Comandante San Martín.

En el desfile no hubo edades que se restasen. Pequeñas cantineras y los Descendientes de los Héroes de la Guerra del Pacífico, algunos de la tercera edad, pasaron gallardos al pie del Morro, aunque fuera desde sus sillas de ruedas. La fiesta, sin duda, se vivió bajo el lema "Arica, siempre Arica hasta morir".