Desde muy joven, a Leonardo Luza Flores le gustaron los números y fue así que se recibió de contador y en la actualidad es el presidente del Colegio de Contadores, regional Arica y Parinacota. Pero no imaginaba que su trabajo llegaría en estos primeros meses del año a tan alto grado de estrés, al punto que fue a parar hace poco al hospital, quedando internado por dos días.
La causa: las modificaciones a la declaración de renta dispuestas por el Servicio de Impuestos Internos derivadas de la reforma tributaria.
"Soy el mejor ejemplo de lo que hemos sufrido los contadores con estas modificaciones, donde tenemos que trabajar los domingos, estar conectados hasta altas horas de la madrugada en el computador, todo lo cual ha repercutido en que no podamos llevar una vida familiar tranquila", reveló el contador junto a su directiva, que además, integran Osvaldo Navarrete Cruzat como vicepresidente y Jacqueline Rojas Zárate como tesorera.
-¿Cómo es que se origina este problema que ha generado un impacto a nivel nacional en su gremio?
- Efectivamente son los mismos problemas a nivel nacional, aunque acá en Arica existen beneficios tributarios como la bonificación a la mano de obra conocido como 889 y otros, pero eso no complica más la actualidad que padecemos. Lo primero a decir en términos muy simples, es que la reforma tributaria comenzó hace 3 años (2015) donde incluso el Colegio de Contadores entregaba sugerencias al Servicio de Impuestos Internos para una mejor marcha de la Operación Renta.
Plazos perentorios
- ¿Qué es lo que cambió para llegar al nivel de estrés que describe?
- La reforma generó esta incomunicación entre los dos estamentos, como son el Colegio de Contadores y el SII, y lo que ocurrió este año es que hay una situación de plazos perentorios como que el 7 de marzo ya venció una declaración y eso nos complicó en el sentido que teníamos que tener los balances realizados a esa fecha y antes el plazo vencía el 30 de abril para poder generar la renta.
- En concreto, los plazos para la entrega de la información se acortaron?
- En efecto, porque hay que entregar, también, las declaraciones juradas de los contribuyentes para este proceso y antes el plazo llegaba hasta junio. El tema es que se aumentaron estas declaraciones pero con una cantidad de columnas a llenar y complejidades enormes.
- ¿Qué efectos ha tenido esto en el quehacer de los contadores?
- Sin estar en contra de la reforma, hemos tenido que estudiarla, gastar mucho material, nos hemos ido capacitando como el caso de la factura electrónica, pero en lo que estamos en contra es en el plazo, que se acortó enormemente y nos complicó. Este año debieran haber dado más plazo, ya que si bien después el SII presenta a los contribuyentes un modelo para declarar apretando un solo click, resulta que el trabajo previo debemos hacerlo los contadores.
-¿Qué repercusiones tuvo esto en la vida familiar de los colegiados?
- En mi propio caso, estuve hospitalizado por el exceso de trabajo y el sistema nervioso de una u otra manera nos afecta, ya que debemos correr por los vencimientos del IVA, el tener las declaraciones juradas, es decir, es demasiado larga la carga tributaria y nosotros los contadores pasamos a ser esclavos del tiempo, sin momento para relajarnos, el SII exige y nosotros estamos obligados a cumplirles en sus requerimientos.
-¿Hay temor de multas, también, por errores en la información levantada por ustedes?
-Eso es otro problema, porque puede haber muchas inexactitudes y errores que lógicamente al aplicarse multas, el contribuyente no va a querer pagarlo él.