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Llegó el Carnaval con la Fuerza del Sol El inicio del evento turístico que hoy mueve bailarines y cientos de millones de pesos

En el primer carnaval, el municipio aportó $13 millones, hoy son más de 600 millones. Entre las 64 comparsas superan los 700 millones de inversión.
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El Carnaval con la Fuerza del Sol hoy es la fiesta turística más grande de Arica, una de las actividades que más espectadores moviliza a nivel nacional y el tercer Carnaval más grande de Sudamérica.

En la primera versión, hace 16 años, se presentaron 1500 bailarines de Mojjsa Uma, Kollas Aymaras, Proyección del Norte, San Pedro de Curahuara, San Pedro de Totora, Andino Sajama y Achachis Generación 90, además de invitados de Puno, Arequipa, Cochabamba y pueblos de la región.

Origen azapeño

Muchos piensan que el Carnaval viene de la Ginga, que se desarrolló durante 20 años con comparsas vecinales, folclóricas y carros alegóricos emulando el carnaval de Río de Janeiro, creado por el fallecido funcionario municipal Carlos "Carlinho" Verdugo. Sin embargo, los más antiguos dirigentes dicen que se remonta a los carnavales que se realizaban en San Miguel de Azapa.

Nancy Lázaro baila en una de las agrupaciones más antiguas, San Pedro de Totora, la cual fue fundada en 1975 y es esposa de uno de los fundadores, Félix Quispe. Ella recuerda que comenzaron bailando en el carnaval de San Miguel de Azapa en los '70 y hace 28 años en la Ginga.

Benedicto Padilla tiene 73 años y es uno de los fundadores de Andino Sajama, agrupación que el 10 de enero cumplió 50 años y que a fines de los '60 comenzó con tarqueadas en San Miguel. "En la Ginga sólo había premios para 3 lugares y en el folclor éramos 7. Pedimos a la organización que nos diera a todos, porque invertíamos harto en trajes y ensayábamos todo el año", cuenta.

Ahí fue cuando la Confraternidad de Asociaciones Folclóricas Andinas de Arica, comenzó a solicitar a la Municipalidad y a su Concejo un evento sólo para mostrar sus bailes.

Tras lograrlo, Benedicto cuenta con orgullo que él escogió el nombre que hasta ahora perdura. "En ese entonces había un candidato en Iquique que tenía una frase que decía 'con la fuerza del norte', y cuando estábamos en reunión para nombrarlo estaba 'el carnaval aymara', 'el carnaval de Arica' y a mí se me ocurrió carnaval 'Con la Fuerza del Sol', y ese ganó", recuerda.

A falta de ginga

Juan Carlos Poli fue encargado de eventos y comunicaciones en la Municipalidad de Arica y durante los primeros 6 años del carnaval, encargado de su producción. "Fue una odisea tremenda, era difícil porque nadie conocía el Carnaval Andino y tenía que funcionar con premios. Se tuvieron que hacer reasignaciones presupuestarias, presentarlo en el Concejo y muchos no tenían fe".

Al final se consiguió el aporte y según Poli, eran pocos los que armaban y desarmaban cada noche el recorrido. "No dormimos en tres noches; éramos 7 a pulso descargando camiones con sillas de los colegios que poníamos en las calles. Terminaba el evento y las apilábamos".

Todo ese esfuerzo se vio reflejado rápidamente, porque a 5 años del primer carnaval, en 2007, recibieron el premio Apes que entrega la Asociación de Periodistas de Espectáculos. "Este era el evento del verano y que más turistas atraía, porque a la reina de playas y primavera no venía gente, al nacional de cueca sólo las familias y eso no se reflejaba en la economía, en cambio el Carnaval lo demostró desde sus inicios".

Tercero de sudamérica

Hoy participan 64 comparsas: 17 de pueblos, 11 de Caporales, 8 de Morenadas, 7 de Tarqueadas, 6 de Tobas, 6 de Tinkus, 3 de Afros, 3 de Diabladas y 3 de Waca waca. De estos bailes, 33 son parte de la Federación de la Cultura y las Artes Kimsa Suyu y 31 se agrupan en la Confraternidad de Bailes Andinos Inti Ch'ampampi.

Son más de 15 mil bailarines vistos por alrededor de 180 mil espectadores durante tres días. Pero si comparamos estas cifras con los otros dos mayores carnavales de la región (Río de Janeiro y Oruro), todavía falta mucho.

Cada año Oruro convoca alrededor de 500 mil espectadores, mientras que Río a un millón. De acuerdo a la Universidad Técnica de Oruro, en 2016 se generó un movimiento de 35 millones de dólares y de acuerdo a la Secretaría Municipal de Turismo de Brasil, en 2015, los turistas aportaron 782 millones de dólares. En Arica aún no se hace un estudio sobre los alcances económicos, pero es innegable el impacto en la ocupación hotelera y los servicios asociados al turismo.

El presidente de la Confraternidad, Martín Montecinos, manifestó que el carnaval de Arica está en la búsqueda de una identidad propia y que de forma natural ya se ve y diferencia de los dos anteriores.

"Es la unión de los pueblos netamente de la región y al ser Arica una ciudad bifronteriza, muestra la convivencia natural con las danzas de origen boliviano y peruano".

Danza de millones

En 2002, la Municipalidad aportó 13 millones de pesos para la realización del primer Carnaval.

Hoy destina más de 600 millones, de los cuales 165 son para premios a repartir entre las 64 comparsas; 76 millones en promoción y difusión; 40 millones en graderías; 30 millones en sonido; 15 millones en pago de bonos a los 300 funcionarios municipales que trabajan durante ese fin de semana; 11 millones en traslados, alojamiento y catering para el jurado y 8 millones en las cenas de recepción y clausura.

Javier Domínguez, presidente de la Federación Kimsa Suyu, explicó que el aporte del premio no es ni siquiera la cuarta parte de lo que invierte cada agrupación en el evento.

"Sólo en la tarqueada sencilla que represento, gastamos alrededor de 12 millones de pesos en conjunto, en vestimenta e instrumentos. En la Federación hay morenadas que gastan más de 100 millones de pesos y en la Confraternidad hay morenadas más grandes". Si cada agrupación sólo gastara 12 millones de pesos en general, por lo bajo entre las 64 comparsas se invierten 700 millones de pesos, sin embargo, hay comparsas más grandes.

Inversión futura

Ricardo Jorquera, director en la Cámara de Turismo de Arica, comentó que cada año ha ido aumentando la cantidad de personas que vienen, tanto participantes como público.

"El 100% de la capacidad hotelera está ocupada, además todos los restoranes han tenido que aumentar su personal. En hospedaje notamos un déficit notable, el registro de la región no alcanza a superar las tres mil camas y creo que a futuro tenemos que estar pensando en unas mil más".

Frente a este crecimiento, Martín Montecinos, presidente de la Confraternidad, piensa que como el Carnaval ya está instaurado en el centro de Arica, toda inversión pública que se realiza debiese planificarse tomándolo en cuenta; "la inversión que hizo el Serviu en el centro fue millonaria, pero ello no se ve reflejado para el Carnaval.

Quizás se pudo haber incluido un diseño que lo identificara. Mal que mal es la actividad más importante del año y deberíamos hablar el mismo idioma".