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Grupo de expertos partió a visitar Pampa Campanane

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Una reunión con la intendenta Gladys Acuña y el comandante de la Sexta División de Ejército, general de Brigada Helmut Kraushaar, fue la primera actividad que cumplió ayer en Arica el grupo de expertos del Ministerio de Bienes Nacionales, que llegó desde la capital para recoger más información sobre las 8 mil 700 hectáreas de terreno que fueron destinadas al Ejército en el sector de Pampa Campanane.

La decisión motivó una serie de protestas de parte de la comunidad de Socoroma, que reclama que no fueron consultados sobre ella.

El equipo liderado por Álvaro Medina, jefe de la División de Catastro Nivel Central; Gloria Inzunza, profesional del Departamento de Estudios Territoriales y Eliud Gutiérrez, Profesional del Departamento de Estudios Territoriales partió luego a terreno, junto a representantes del Ejército, para recoger información, en virtud de los nuevos antecedentes aportados por la Conadi, respecto de la existencia en el lugar de sitios de valor patrimonial.

El pasado lunes 6 de noviembre se conformó una mesa de trabajo entre los Ministerios de Bienes Nacionales (BBNN); Defensa y el Ejército con la finalidad de buscar una solución a la destinación que se le hiciera al Ejército en el sector de Campanane al alero de la "Mesa de Chena". Ese mismo día, se reunión la Ministra con la intendenta y hoy ya se encuentra el equipo en el sector.

En Santiago, la Ministra Palma dijo que al momento de realizarse el estudio de dichos terrenos, no existía antecedente alguno respecto de que hubiese sitios arqueológicos ni demandas indígenas ni ocupaciones ancestrales, antecedentes que fueron conocidos por el Ministerio de Bienes Nacionales el 17 de octubre de 2017, es decir, un año después del acuerdo Acta de Chena IV.

Tecnología médica es la carrera que más tardan en completar

Le siguen Agronomía e Ingeniería en Computación. El promedio general es de un año más.
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Un año más de lo estipulado tardan en promedio los estudiantes de la Universidad de Tarapacá (UTA) en terminar sus carreras. Según informó el director de calidad institucional de la UTA, Edgar Estupiñán, ha existido una reducción de la sobreduración en la titulación de las carreras, ya que en el 2012 el promedio era de un año y medio.

"Los estudiantes han disminuido de un promedio de 1,3 veces la duración ideal el 2012 a 1,2 veces en el 2016, ubicándose por debajo del promedio nacional de carreras profesionales con licenciaturas, las que duran 13,4 semestres promedio, según el Servicio de Información de Educación Superior (SIES)", dijo.

A modo de ejemplo, una carrera que tiene una duración de cinco años era terminada por un alumno en tres semestres más de lo estipulado, lo que significa un año y medio de tardanza en el proceso de titulación. Actualmente, los jóvenes se atrasan en promedio un año más.

Dentro de las carreras con más alta sobreduración en la universidad estatal destacan Tecnología médica mención laboratorio con 1,5 veces más (carrera de cinco años se termina en siete años y medio), seguido de Agronomía e Ingeniería en Computación e Informática con 1,4 veces la duración de la carrera (Agronomía de 5 a 7 años e Ingeniería en Computación en Informática de 6 a 8 años).

Las carreras con menor sobreduración, en tanto, son Ingeniería en Sistemas de Información y Control de Gestión (de cinco a cinco años y medio) e Ingeniería Civil Industrial (de seis años a seis años y medio).

Ramos de especialidad

Daniela Mancilla y Silvana Jorquera son alumnas de Tecnología médica. Cuentan que los ramos más complicados son los que tienen que ver con la especialidad, que para esta carrera pueden ser laboratorio clínico, imagenología u oftalmología.

"Son más complejos de aprobarlos, por ejemplo bioanálisis, que tiene que ver con trabajo en laboratorio y análisis de datos. Al ser ramos prácticos son más difíciles, ya que en los primeros años vemos más teoría", señalaron.

Por otro lado, Carolina Romero, ex alumna de Agronomía manifestó que la UTA cuenta con buenos profesionales, que manejan mucho el tema agronómico, "pero no la docencia. ya que no cuentan con buena metodología para enseñar, entonces era común quedarse con algunas asignaturas".

"Para nosotros los ramos más complicados eran al comienzo de la carrera, como matemática o física y es porque no todos saben realmente de qué trata la agronomía", sentenció.